Debido a factores como una alimentación rica en grasas y proteínas animales, tabaquismo, consumo excesivo de alcohol, así como el incremento en la esperanza de vida, el cáncer colorrectal (CCR) es cada vez más frecuente y mortal en México y el mundo.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 2002 este tipo de cáncer reportó una incidencia de 3.5% en México, mientras que en 2012 dicha estadística creció a 5.8% y hoy ocupa el cuarto lugar entre las enfermedades oncológicas más frecuentes en el país.
Asimismo, un reciente informe de la OMS y la Agencia Internacional para la Investigación sobre el Cáncer señala que se ha registrado un aumento "alarmante" de nuevos casos de padecimientos oncológicos, sobre todo de pulmón, mama y colorrectal, de ahí la urgente necesidad de aplicar estrategias eficaces de prevención para limitar su incidencia.
“Es fundamental tomar medidas que permitan revertir esta tendencia y favorecer la detección temprana del CCR, pues de esto depende un pronóstico favorable para el paciente”, advirtió la doctora Gredel Portela Rubio, integrante de la Sociedad Mexicana de Oncología. De acuerdo con la Asociación Mexicana de Gastroenterología, 90% de los pacientes sobreviven a cinco años cuando el cáncer se diagnostica en etapas tempranas, pero la estadística cae a menos de 5% cuando se detecta en etapas avanzadas.
Un cáncer colorrectal en etapas avanzadas implica que las células malignas ya han invadido otros órganos o tejidos, lo cual se conoce como metástasis. Las áreas más comunes hacia las cuales se extiende el cáncer colorrectal son el hígado, el revestimiento del estómago y los pulmones; se calcula que entre 50-60% de los pacientes diagnosticados con CCR desarrollarán metástasis.
Si bien existen factores de riesgo inevitables, como ser mayor de 50 años, contar con un historial personal o familiar de cáncer colorrectal, así como otros aspectos hereditarios, es posible reducir las probabilidades de desarrollar este padecimiento oncológico atacando sus factores de riesgo.
Finalmente, la doctora Gredel Portela Rubio destacó que en caso de presentar uno o más síntomas relacionados con el cáncer colorrectal (sensibilidad y dolor abdominal en la parte baja del abdomen, sangre en las heces, diarrea, estreñimiento u otros cambios en las deposiciones, fatiga y pérdida de peso sin razón aparente) es importante acudir al médico, ya que una detección temprana ayudará a controlarlo y a vivir con mejor calidad.
CUADRO
American Cancer Society (ACS) hace las siguientes recomendaciones:
5. Dile adiós al cigarro: Fumar entre 20 y 35 paquetes de cigarrillos al año aumenta el riesgo de sufrir cáncer colorrectal. Asimismo, aquellas personas que han fumado por varios años y mantienen este hábito tienen más riesgo de desarrollarlo que quienes ya abandonaron dicha adicción o jamás la han tenido.