Una red internacional de trata de mujeres y lavado de dinero que operaba en la colonia Lomas de Chapultepec, Delegación Miguel Hidalgo del Distrito Federal; así como en la zona residencial de La Herradura del municipio de Huixquilucan, Estado de México, fue desmantelada mediante un operativo conjunto realizado por la Policía Federal y la Procuraduría General de la República (PGR).
El Director de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) de la PGR, Tomás Zerón de Lucío, explicó que durante dicha acción fueron rescatadas mujeres provenientes de República Checa, Hungría e Israel, además de que se incautaron dos inmuebles y un millón 500 mil pesos en efectivo
De acuerdo con el titular de la AIC, Tomás Zerón, dicha red utilizaba como negocios “fachada” un club privado ubicado en Las Lomas y una casa de cambio localizada en La Herradura, instalaciones en las que también se realizaban apuestas ilegales y se distribuían diversas drogas como la marihuana.
Además, en el establecimiento de Las Lomas se explotaba sexualmente a las mujeres checas, húngaras e israelitas, las cuales eran ingresadas a México de manera ilegal por esta red trasnacional del crimen organizado, mismas que luego de ser rescatadas fueron repatriadas a su país, ya que su calidad migratoria en nuestro país “era irregular” según el reporte de Tomás Zerón.
En tanto, el centro cambiario era usado por este mismo grupo para el lavado de dinero a través de la compra y venta de divisas, por lo que al momento del operativo realizado por la AIC con apoyo de la Policía Federal e información de la Secretaría de Hacienda y el CISEN también se incautaron paquetes de marihuana, equipos de cómputo y aparatos de radiocomunicación.
Tomás Zerón añadió que todas las personas que se encontraban en el Club Privado de las Lomas de Chapultepec fueron puestas a disposición de un Ministerio Público Federal para que se determine su situación jurídica y se deslinden responsabilidades.
En otro evento, la PGR detuvo a una presunta líder de una red dedicada al tráfico de indocumentados centroamericanos que operaba en México, la cual introducía a nuestro país a menores de edad provenientes de países como Guatemala para posteriormente enviarlas a territorio de Estados Unidos de América.
La líder de dicha organización fue identificada como Esther Alicia Tineo Rivera, la cual llegaba a ingresar a la Unión Americana hasta 50 personas mensuales, a las cuales cobraba cantidades que iban de los cuatro a los seis mil dólares por cada una de ellas.
Sin embargo, cuando los polleros de esta organización se veían en peligro por la presencia de autoridades migratorias de Estados Unidos, abandonaban a sus víctimas, sin que les importara el destino de los menores de edad.
Al momento de su captura, Esther Alicia Tineo Rivera se encontraba en compañía de tres mujeres, una ecuatoriana mayor de edad y dos guatemaltecas de 7 y 9 años, las cuales pretendían cruzar la frontera.
A la presunta traficante, un juez federal le dictó auto de formal prisión por los delitos de tráfico de indocumentados y delincuencia organizada; mientras que las víctimas ya fueron repatriadas a sus países de origen, informó el titular de la AIC, Tomás Zerón.