Familiares y amigos de los 12 jóvenes fallecidos durante la tragedia de la discoteca New´s Divine, se presentaron en las puertas de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF), con el fin de protestar y pedir al titular de la dependencia, Rodolfo Fernando Ríos Garza, justicia por la muerte de las víctimas.
El señor Martín Rocha Sánchez, padre de una víctima, interpuso una queja en la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), acusando al ex jefe delegacional en Gustavo A. Madero, Francisco Chiguil Figueroa, y a la ex directora Ejecutiva de Seguridad, Lizbeth Eugenia Rosas Montero por “flagrante violación a los derechos humanos en agravio de mi esposa, mis hijas menores y familia”.
Así mismo en la Denuncia de Hechos presentada el 4 de julio de 2012 ante la Subprocuraduría de Atención a Víctimas del Delito, el padre de la víctima señalo al ex jefe delegacional en GAM, como uno de los principales culpables, ya que dice que “se castigo a los policías, y los auténticos responsables siguen en libertad, gozando del erario público”.
Los manifestantes exigieron al procurador capitalino, así como al Jefe de Gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera, justicia para que no se permita que los homicidas se queden sin castigo. “La sociedad y los padres de las víctimas no nos merecemos esta injusticia y funcionarios como Francisco Chiguil, Lizbeth Rosas y Rafael Bustamante, entre otros, gozan de total impunidad en el caso y siguen burlándose de la justicia pese a la muerte de 12 personas inocentes que cargan sobres sus hombros” dijeron los manifestantes.