Un frente común, para impedir la edificación de obras ilegales en esa demarcación, formaron el alcalde electo de Miguel Hidalgo, Víctor Hugo Romo
Guerra y la presidente del Colegio de Arquitectos de la Ciudad de México, Susana Miranda Ruíz.
La representante de los arquitectos colegiados de la capital del país y Romo acordaron suscribir un convenio de colaboración en octubre próximo, una vez que el representante de Morena asuma la alcaldía.
Juntos, Colegio y Alcaldía, acordaron que colegiados asesorarán a los vecinos en materia de normatividad de desarrollo urbano, para impedir la edificación de obras irregulares en Miguel Hidalgo.
Prevén formar una brigada de colegiados que colabore en la supervisión, en los lugres de construcciones que sean denunciadas por vecinos, a fin de determinar su viabilidad y legalidad.
El Colegio está dentro de la demarcación y será un aliado estratégico para empoderar a los vecinos e impedir que sean engañados por desarrolladores y constructores que acostumbran violar las leyes, indicó.
Miranda Ruíz dijo que es necesario difundir entre los vecinos las normas y las reglas que regulan en todo momento las construcciones.
En un comunicado conjunto, coincidieron en instalar un módulo de atención ciudadana del Colegio todos los miércoles ciudadanos y formar la brigada de colegiados que acudan a disipar todas las dudas vecinales sobre las construcciones que se pretendan edificar en la demarcación.
La mejor manera de combatir la discrecionalidad y la corrupción es buscar que los ciudadanos acompañen a los gobiernos y se conviertan en observadores críticos y permanentes de sus decisiones y acciones, señalaron.
Miranda invitó al futuro alcalde a una reunión los próximos días, con dos colaboradores, con la finalidad de definir el contenido del convenio y formalizar la colaboración interinstitucional, para iniciar las jornadas de capacitación ciudadana desde el principio del gobierno del representante de Morena.
La colaboración interinstitucional con gremios comprometidos en el bienestar ciudadano como el Colegio, fortalece la gobernabilidad democrática y ayudan a corregir deficiencias o carencias institucionales, además de prevenir conductas contrarias al interés público.