Luego de distintas y prolongadas reuniones con alegatos a favor y en contra, ayer finalmente fueron votadas y aprobadas las reformas propuestas por la Cámara de Diputados a la Ley del Instituto Mexicano del Seguro Social –IMSS- para homologar el salario base de cotización con el pago al Impuesto Sobre la Renta de los Trabajadores.
Con tal medida, se aseguró después de la sesión plenaria, se podrá simplificar, fiscalizar y recaudar lo justo, toda vez que en la aún vigente legislación era costumbre que los patrones reportaran un salario base menor de los trabajadores en materia de seguridad social y uno más alto en el rubro del Impuesto Sobre la Renta.
Fueron 336 los votos a favor, 115 en contra y 13 abstenciones, el total de votos emitidos por los legisladores de todas las bancadas políticas, cantidad que una vez reconfirmada motivó dar por terminado el caso y la directiva ordenó enviar la minuta correspondiente al Senado de la República para su revisión y análisis y posible ratificación, para de ser el caso, proceder a su promulgación.
Cabe mencionar que durante el desarrollo de la sesión los legisladores aceptaron la reserva del perredista Carlos Altamirano, para proponer que los impuestos de patrones y trabajadores sean invertidos fundamentalmente en infraestructura, ya que antes de la reforma aprobada, el propio titular del IMSS, José Antonio González Anaya, reveló que con la modificación citada, la nueva ley permitiría cuando menos cerca de 3 mil millones de pesos adicionales cada año.
A su vez, durante la presentación del proyecto, el diputado del PRI, Jorge Herrera, mencionó que con esta reforma se pretende corregir distorsiones del sistema legal vigente que han permitido a algunos patrones, subestimar los salarios de sus trabajadores, para pagar menos cuotas al Seguro Social, y por la otra parte, sobreestimar los mismos salarios al SAT, para poder obtener una mayor deducción del Impuesto Sobre la Renta.
Con ello, dijo, se considera perjudicial que se eludan las obligaciones con el erario, por una laguna o una inconsistencia, dejando por un lado de contribuir a la hacienda pública y por el otro a las prestaciones sociales de una clase vulnerable.
Por su parte, el panista José Arturo Salinas, aseguró que con esta reforma se reducirá el salario de los trabajadores y las empresas serán menos competitivas y generarán menor cantidad de empleos.