Es alarmante que el gobierno capitalino analice la posibilidad de incrementar los costos de ingreso al servicio, que es de 6 pesos, importe superior al de otros medios de movilidad como el Metro, Trolebús o Microbús, que promedian los 5 pesos, consideró el diputado del PRI Roberto Ruiz Moronatti.
El Metrobús se implementó en la Ciudad de México para ofrecer a la población un modo efectivo de movilidad; es un sistema de autobuses de gran capacidad y equipados con tecnología de punta, que brinda, además, un servicio rápido y seguro que integra una infraestructura preferente, operaciones continuas y un método de pago automático.
Señaló que el 80 por ciento de la población que habita en la capital del país utiliza el transporte público para realizar sus actividades diarias, es decir, en la gran mayoría de los casos, es el único medio con el que la sociedad cuenta para trasladarse a su lugar de empleo, educación u otros servicios.
Por lo anterior impulsa un punto de acuerdo para exhortar al jefe de gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera, a no aprobar el aumento a la tarifa del Metrobús, ni cobros en los transbordos de la red.
En el documento, presentado en la Permanente y turnado a la Primera Comisión –Gobernación, Puntos Constitucionales y Justicia-, explicó también que los viajes metropolitanos, aquellos que transitan desde el Estado de México hacia la ciudad, ascienden a 4.2 millones de personas cada día.
Ruiz Moronatti consideró que dichas cifras representan retos para este medio de transporte, como son la saturación en horas pico, el incremento del precio y la baja calidad de otros transportes.
Consideró que “el Metrobús es el servicio de movilidad más apto para la ciudad, es la opción más viable en cuestiones de vialidad, economía, ecología, y seguridad”.
Supera opciones como el Metro o el Trolebús, medios que tienen costos superiores de adquisición, mantenimiento y operación, además, de que su funcionamiento depende de factores como el cableado eléctrico, comentó.
El Distrito Federal requiere medios de transporte que permitan cubrir la demanda de todos los usuarios; sin embargo, se debe analizar el cómo implementar dichos servicios sin afectar la economía de los ciudadanos.
“Recordemos también, que alrededor del 50 por ciento de los ingresos que la mayoría de la población adquiere como parte de su trabajo, lo destinan a costear sus traslados en transporte público”.
Hoy, a pesar de que dicho medio fue elegido sobre otras opciones que se consideraron menos viables, el Metrobús se ha convertido en uno de los transportes más costosos.
“Incrementar el precio de este sistema representaría un gran golpe a la economía de las familias que diariamente tienen que hacer uso de este servicio”, indicó.
REVISAR ACTUALIZACIÓN TARIFARIA
Por su parte, Jesús Padilla, presidente de la empresa Corredor Insurgentes (CISA), operadora de la Línea 1, consideró que la actualización tarifaria en Metrobús podría ser gradual e indexada a la inflación anual y no como ocurre con otros servicios de transporte.
“La tarjeta de prepago no ha tenido la utilidad que requiere en materia tecnológica; si la inflación aumenta 5 por ciento en un año, hay que subir 17 centavos al costo y no 1.50 pesos después de dos años.
“El impacto que resiente el usuario es mayor cuando se deja que se acumule y se rezaga la operación de las empresas. Esto es un círculo muy peligroso. Creo que la tarjeta permitiría actualizar la tarifa de manera constante”, dijo Padilla.
En su participación en el foro Metrobús Insurgentes, 10 Años Después, el presidente de CISA consideró que una revisión que también sería positiva sería la de analizar el cobro de un porcentaje del costo total de cada viaje cada vez que se hiciera un trasbordo o que se haga un cobro diferenciado por kilómetros recorridos.
Agregó que un sistema diferenciador de tarifa ofrecería viabilidad financiera al sistema, evitaría aumentos que impacten la economía de los usuarios y que el gobierno se vea obligado a destinar un subsidios.
Guillermo Calderón, director general de Metrobús, aseguró que la tarifa actual de seis pesos tiene equilibrio financiero.