Para la UNESCO, una Ciudad del Aprendizaje es la que ofrece educación a sus ciudadanos no sólo en el ámbito de la educación formal, sino en el de la educación para la vida dentro y fuera del mismo. El Distrito Federal es una ciudad con los elementos suficientes para afianzar su participación como una Ciudad del Aprendizaje.
La secretaria de Educación del Distrito Federal, Mara Robles Villaseñor fue nombrada vicepresidenta y presentó los resultados del estudio realizado en la capital del país durante los últimos seis meses. En este marco señaló que “con el aprendizaje para toda la vida, las ciudades se convierten en escuelas sin muros”.
Robles Villaseñor, acogió la Declaración de Beijing para el Desarrollo de las Ciudades del Aprendizaje con el propósito de consolidar a la Ciudad de México como una urbe donde la educación sea para toda la vida con inclusión social, prosperidad y sostenibilidad.
“Debo decir que el pilotaje llevado a cabo nos ha permitido tener una visión más amplia y objetiva de las potencialidades del DF como Ciudad del Aprendizaje, gracias a este primer gran ejercicio de sistematización de las Características Clave con información recabada desde nuestras instituciones de Gobierno y alimentada con la percepción de la sociedad -a través de encuestas- y el conocimiento de expertos”, dijo. Tras exhibir los resultados del estudio, en el que participaron la Ciudad de México y Sao Paulo, realizado en coordinación con la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) y que define las características clave de una Ciudad del Aprendizaje, la encargada de la educación comentó que el Distrito Federal puede convertirse en una de ellas.
La secretaria capitalina resaltó que entre las cualidades de la capital del país destaca la capacidad básica de alfabetización, la formación en inclusión, la equidad y el empoderamiento de las mujeres; la apropiación del espacio público a través del fomento de actividades culturales, el uso de nuevas tecnologías, la actualización y formación para el trabajo, el ejercicio de una ciudadanía activa por medio de la participación voluntaria y de actividades comunitarias, así como de una educación ambiental y la promoción de la innovación. “La Ciudad de México tiene hoy enormes oportunidades de avanzar en su consolidación como Ciudad del Aprendizaje debido a la combinación de diferentes factores: nivel educativo, experiencia de Gobierno, transformación del espacio público, dinamismo social y político, emergencia de nuevos actores y grandes acervos y confluencias culturales tangibles e intangibles”, señaló Robles Villaseñor.