El Comité para la Investigación de Incidentes Relevantes (CIIR) del Sistema de Transporte Colectivo (STC) concluyó que hubo errores y omisiones por parte de un conductor y un regulador en el accidente del lunes 4 de mayo en la estación Oceanía de la Línea 5.
Los elementos que sustentan esta averiguación son base también para iniciar los procedimientos respectivos ante las instancias competentes, expuso el Director de Ingeniería y Desarrollo Tecnológico del STC y Secretario Técnico del Comité, Miguel Gerardo Requis.
En conferencia de prensa, el Director General del STC, Joel Ortega Cuevas, afirmó que hubo un doble error humano.
Explicó que, por un lado, el conductor del tren 05 no cambió de pilotaje automático a modo de conducción manual, por lo cual no pudo frenar a tiempo; por otro lado, el regulador no emitió el Despacho Bajo Orden en la estación Terminal Aérea para evitar la salida del tren 05 hasta que el 04 desocupara completamente el andén en la estación Oceanía.
Respecto a las sanciones al personal del STC, el funcionario capitalino indicó que el dictamen del Comité será entregado a la Contraloría General y a la Procuraduría General de Justicia, ambas instancias del Distrito Federal, para que las integren a la averiguación pertinente y determinen responsabilidades.
El ingeniero Miguel Gerardo Requis sostuvo que los elementos confirman que el tren 05, motrices M0576/M0577, circulaba en condiciones adecuadas. Prueba de ello es que en esa fecha lo condujeron cuatro operadores sin que alguno reportara fallas. Fue el quinto operador, en su primera vuelta, quien se impactó contra el tren 04.
Conforme a los análisis técnicos y la valoración de declaraciones, el Puesto Central de Control (PCC) del STC emitió la indicación para aplicar la marcha tipo lluvia, misma que registró la Programadora General de Tráfico (PGT) activando la señal visible correspondiente al Cofre de Señalización de Marcha.
Esta señal sí fue acatada por otros conductores, como el del tren 04 que sí tomó las medidas necesarias para llegar a la estación Oceanía adecuadamente.
Sin embargo, el conductor del tren 05 omitió acatar dicha señal, lo cual fue detectado y grabado por el Registrador Electrónico de Eventos, conocido como “caja negra”.
Junto con sus conclusiones, el CIIR del STC emitió una serie de recomendaciones tendientes a evitar que estos accidentes se repitan.
La investigación compiló grabación en audio y video, las bitácoras, los registros de mantenimiento de las instalaciones, los equipos y de los trenes, así como los informes y las declaraciones del personal, a fin de efectuar una valoración integral de cada elemento, confrontar las posibles divergencias y llegar a una conclusión en forma imparcial.