La ciudadanía está totalmente inconforme con el tema de las fotomultas, toda vez que esta práctica ha demostrado estar “amañada” obligando a los conductores de vehículos a pagar por infracciones incluso, inexistentes.
Así lo señaló la Comisionada del Partido del Trabajo en la Ciudad de México, Magdalena Núñez Monreal, tras afirmar que los capitalinos están llegando al hartazgo de las acciones cupulares en la capital del país.
Por ello, invitó al Jefe de Gobierno de la Ciudad, y a los responsables de este programa de amonestación, que revisen el tema de fotomultas y tengan oídos atentos a lo que expresa la ciudadanía sin obligarlos a irse al último recurso que tenemos como ciudadanos para obligar a que se respeten nuestros derechos o que se apliquen con justicia las sanciones y no seamos sujetos de abuso por parte de la autoridad.
La líder partidista destacó que las estadísticas demuestran que con respecto al año pasado, el número de fotomultas se ha duplicado en los primeros meses de 2017, y los afectados argumentan que en muchas ocasiones estas son infundadas, teniendo que recurrir al amparo para proteger sus derechos y evitar un cobro indebido.
Núñez Monreal aseveró que los comentarios más generalizados de los habitantes de la gran urbe van en el sentido de que “esto es una campaña de recuperación de recursos para fortalecer las economías de la ciudad ya que están en vísperas de elecciones, por lo que debemos tener mucho cuidado verificando el seguimiento a ese recurso para saber cómo y en que se va a aplicar.
Debemos evitar que se dé un uso discrecional y pedir que se transparente porque, mucho del reclamo de la población que nosotros hemos escuchado, es que hay una acción muy excesiva en este sentido”, abundó.
Señaló que los argumentos de la ciudadanía van directamente en el sentido de que “como ya están tan cerca las próximas elecciones federales, deben tener mucho cuidado para transparentar estos recursos aclarando en que los utilizarán para evitar una percepción tan negativa como la que tiene la ciudadanía al respecto”.
Cabe resaltar que la petista conmino a la sensibilidad de las autoridades locales para que revisen a la mayor brevedad este sistema que está ocasionando tanta inconformidad entre la población, no sólo de los habitantes del antiguo Distrito Federal, sino de los foráneos que nos visitan y que lamentan que al llegar a la capital del país, se encuentren con los oficiales de tránsito esperándolos en lugares prácticamente estratégicos para “morderlos” y “extorsionarlos” para que puedan entrar a la ciudad sin pretextos.