En México, en el último año, los embarazos en jóvenes mujeres se incrementaron en 30% y para 2021, se prevé el nacimiento de 28 mil bebés de madres entre los 14 y 17 años,
ante esta situación, el Congreso Local solicitó a la secretaría de Inclusión y Bienestar Social de la Ciudad de México un informe sobre las acciones realizadas para dar atención a la problemática suscitada por el incremento de embarazos en la población de mujeres adolescentes y jóvenes que viven en situación de calle en la Ciudad de México.
En tribuna, Elizabeth Mateos Hernández, Coordinadora de la Asociación Parlamentaria Mujeres Demócratas, enunció que las niñas, adolescentes y jóvenes en situación vulnerable están expuestas a procesos de gestación sin supervisión de su salud y alimentación, por lo que planteó la urgente necesidad para que la Secretaría de Inclusión y Bienestar Social local a través del Instituto de Atención a Poblaciones Prioritarias (IAPP) informen al Congreso local sobre las acciones realizadas para dar atención a la problemática producida por el incremento de embarazos en la población de mujeres adolescentes y jóvenes en situación de calle.
A la par, la legisladora exhortó a la secretaría de Inclusión y Bienestar Social atender y realizar acciones para prevenir y disminuir los índices de embarazos en este sector poblacional, toda vez que los datos son alarmantes, México ocupa el primer lugar en embarazos adolescentes entre las naciones de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), con una tasa de fecundidad de 77 nacimientos por cada mil adolescentes de 15 a 19 años de edad.
En el país, 23% de los adolescentes inicia su vida sexual entre los 12 y los 19 años y de acuerdo con el Consejo Nacional de Población (CONAPO), ese comienzo se da a una edad promedio de 15.5 años, agregó Mateos Hernández.
Los jóvenes y adolescentes han sido los afectados en muchos sentidos por la pandemia de Covid-19 y los datos del CONAPO así lo reflejan, en el último año, en México ha habido un incremento de 30% de embarazos y para 2021 se prevé, 28 mil nacimientos más de madres adolescentes, subrayó la coordinadora de Mujeres Demócratas.
En 2020 se registraron 373 mil 600 nacimientos, siendo menores de 18 años quienes dieron a luz y en este año, con cifras del CONAPO, 8 mil 876 adolescentes han sido madres a los 14 años, muchos de estos embarazos, fueron producto de violencia sexual derivada del confinamiento por la pandemia. Además, 9.4% de las mujeres mexicanas han sufrido abuso sexual, acoso, violación o incesto durante la infancia. En 27.5% de los casos el agresor fue un tío, 9.3% un hermano, 6.6% el papá, 15% de los casos otro familiar, en 13% un conocido, y en 9.7% un desconocido.
Mateos Hernández destacó que los embarazos a edad temprana son complicados, cuanto más joven es la madre, más peligroso tanto para el bebé como para ella. En el bebé, se presentan problemas de mala nutrición, partos prematuros, niños con trastornos en el desarrollo y mayores probabilidades de morir en las primeras semanas de vida; para la madre: las complicaciones médicas del feto en desarrollo también le afectan a nivel físico, riesgo de preeclampsia y eclampsia, peligro de fístula obstétrica, así como una alta mortalidad de la mamá.
La diputada explicó que las personas en situación de calle, en especial niñas, niños y adolescentes, son evidencia de la descomposición del tejido social. Los efectos de la convivencia familiar disfuncional generada por la pobreza, factores de violencia doméstica como ataques sexuales, golpes o maltrato psicológico, casos de alcoholismo o drogadicción en su entorno, orillan a los infantes y adolescentes a tomar decisiones drásticas como salirse de su casa.
Por ello, es responsabilidad del gobierno y la sociedad prestar atención a esta problemática social; el desarrollo de políticas públicas para la atención de este sector de la población en situación de vulnerabilidad es un tema que ha sido abordado por los gobiernos, pero hasta el momento, los esfuerzos no han sido suficientes, finalizó Elizabeth Mateos.