Puerto Vallarta, México, 29 de julio de 2025 ::: Juan Carlos Rodríguez Lovera, egresado de la licenciatura en Farmacia
de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Cuautitlán, desarrolló un emulgel para el tratamiento del acné que contiene aceite de árbol de té encapsulado en nanopartículas lipídicas. Esto lo hizo merecedor al Premio a la Innovación Cosmética 2025, durante el 29° Congreso Nacional de Química Cosmética “Cosmética inclusiva, ciencia y bienestar”, en Puerto Vallarta, Jalisco,
Cada año, la Sociedad de Químicos Cosmetólogos de México otorga este premio para estimular la investigación en ciencia y tecnología en el área en México.
El ahora estudiante de maestría, adscrito al Laboratorio de Investigación y Posgrado en Tecnología Farmacéutica, explicó que, por su naturaleza intrínseca, la industria cosmética siempre ha enfrentado cambios e innovaciones que dan pie a numerosas oportunidades para el desarrollo de productos más eficaces, seguros y naturales.
Por esa razón, y bajo la coordinación de David Quintanar Guerrero, María de la Luz Zambrano Zaragoza, Luis Eduardo Serrano Mora, Paul Olalde Velasco y Lysett Corona Gómez, elaboró una emulsión capaz de tratar el acné, una de las afecciones cutáneas con alto índice de frecuencia en todo el mundo.
De acuerdo con Juan Carlos Rodríguez, los enfoques terapéuticos tradicionales comprenden medicamentos tópicos y orales, entre los que destacan los antibióticos (clindamicina, eritromicina), el peróxido de benzoilo, los retinoides y los queratolíticos. Para casos más severos se recurre a tetraciclinas e isotretinoína, pero estas opciones presentan algunas desventajas y riesgos, como la resistencia bacteriana, efectos secundarios significativos, irritación cutánea, costos elevados y poca accesibilidad.
El emulgel que propone el universitario tiene varios beneficios respecto a lo existente en el mercado, como el uso del aceite del árbol de té, producto natural que se obtiene a partir de una destilación a vapor de agua de las hojas frescas y la corteza de esta especie, originaria de Australia.
Otro de los factores que aporta preeminencia a esta formulación es la implementación de nanotecnología, la cual ha transformado la administración de los fármacos, abriendo nuevas fronteras en la capacidad de tratar y diagnosticar enfermedades.