Además de cuidar la integridad de los condóminos, la Procuraduría Social (Prosoc) y el Instituto de Verificación Administrativa (Invea), pretenden devolver las áreas comunes de las unidades habitacionales a su estado y uso original para lo que fueron creadas.
El Procurador Social Alfredo Hernández Raigosa dijo que la violación en uso de suelo pone en riesgo la vida de sus habitantes.
Durante la firma del convenio de Colaboración y Coordinación Específica con el el (Invea) el funcionario apuntó que este convenio “es una herramienta que nos hacía falta para entrar con más fuerza a los conjuntos habitacionales”, que están bajo el régimen de propiedad en condominio.
Hernández Raigosa destacó la problemática que en la actualidad existen en las unidades habitacionales de la Ciudad en las que, dijo, se han invadido áreas comunes como estacionamientos y jardines donde se han improvisado viviendas y hasta comercios ocasionando problemas a quienes ahí habitan.
Destacó la intención de la Procuraduría Social en un legítimo interés de fomentar la cultura condominal y una convivencia armónica entre quienes ahí viven. “Porque lo que para un condómino es benéfico, para la mayoría no. Por ello, estamos plasmando acciones conjuntas basadas en las normas que nos rigen”, apuntó.
Ante el consejero presente del Invea, Meyer Lip Gervitz, señaló que de acuerdo a los registros de la Prosoc, de las mil 508 quejas recibidas en el último año, el 8 por ciento corresponde a invasión de áreas comunes, es decir, aproximadamente una de cada 10 está relacionada con la transgresión de las disposiciones del desarrollo urbano y uso de suelo y construcción; así como de la Ley de Establecimientos Mercantiles y de la Ley de Propiedad en Condominio de Inmuebles para el Distrito Federal.
Por ello, celebró la firma de dicho convenio -que entra en vigor a partir de esta fecha- en el que ambas partes se comprometen a realizar todas las acciones legales y administrativas conjuntas que beneficien a los condóminos “tengamos presente que el corazón de la ciudad son las cerca de 8 mil unidades habitacionales en las que viven casi tres millones de habitantes y no se puede mal vivir en ellas".
A su vez Meyer Klip, estableció que el Invea pretende coadyuvar “al buen vivir”, “lo que buscamos es que los habitantes de espacios sociales respeten la entidad habitacional que tienen permitida y si logramos hacerlo, un tercio de la población, que vive en las unidades logrará vivir en armonía”.