Cerca de medio millón de mujeres mayores de 15 años, de un total aproximado de un millón que habitan en unidades habitacionales, han sido objeto de violencia psicológica, física, económica o sexual por parte de su pareja.
El Procurador Social del Distrito Federal (PSDF), Alfredo Hernández Raigosa, subraya la importancia de desarrollar acciones que prevengan, sancionen y erradiquen la violencia contra este género.
Durante la firma de Convenio de Colaboración con el Instituto de las Mujeres (INMUJERES) del Distrito Federal, el titular de la Prosoc subrayó que la violencia hacia las mujeres no es un hecho natural ni privado que queda detrás de las paredes o bajo las sábanas, es un problema social y cultural que impide la equidad y la igualdad entre los hombres y las mujeres.
Ante la titular de INMUJERES, Beatriz Santamaría Monjaraz; el jefe delegacional en Miguel Hidalgo, Víctor Hugo Romo; el presidente de la Comisión de Gobierno de la ALDF, Manuel Granados; y la diputada Dione Anguiano, Hernández Raigosa resaltó que una cada tres mujeres en las unidades habitacionales es víctima de violencia, por lo que se pronunció por la creación de una red de mujeres que permita el tratamiento, atención y erradicación de la violencia.
Subrayó que las mujeres tienen derecho a una vida libre de violencia, sin embargo, por sí sola la violencia no desaparece ni se elimina al paso de las generaciones, “es con acciones educativas desde una perspectiva de género, que se impulsará a hombres y mujeres a reconocer que la violencia hacia las mujeres es un delito”.
Por ello, el Procurador Social aplaudió la celebración de dicho convenio a través del cual se promoverá en las unidades habitacionales una cultura diferente centrada en la equidad, donde las necesidades de las mujeres sean atendidas, y “responsabilizándonos como entes públicos a proteger y garantizar sus derechos como mujeres que habitan en el Distrito Federal”.
A su vez la directora de INMUJERES, Beatriz Santamaría Monjaráz, subrayó que la violencia contra este género es la más extendida y sistemática violación a los derechos humanos, y tiene graves consecuencias y repercusiones en la salud, en la libertad, la seguridad y la vida de las mujeres lo cual impacta negativamente a sus comunidades, genera inestabilidad en las sociedades e impide el progreso hacia la justicia y el desarrollo.
En tanto, el diputado Manuel Granados Covarrubias sostuvo que las mujeres constituyen una prioridad en la agenda de la ALDF, por lo que manifestó respaldo absoluto de los diputados de todo su grupo parlamentario.
En su oportunidad, Víctor Hugo Romo, resaltó la necesidad de crear conciencia de equidad igualitaria, porque aún existe en México y en el DF “una brecha que hay que seguir y erradicar, en donde se ha empoderado más el tema del hombre, del varón, el machismo; con este convenio esta brecha se tiene que ir rompiendo”.