Por segundo día consecutivo, maestros del Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), procedentes de Oaxaca y Michoacán, situaron la ciudad de México, provocando un verdadero caos vial, y afectando de miles de automovilistas y negocios establecidos, al plantarse sobre Paseo de la Reforma.
Un día anterior por la noche los mentores irrumpieron la Cámara de Diputados y con violencia intentaron apoderarse de las instalaciones resultando varias personas lesionadas.
En al menos tres de los cinco estados donde anunciaron paro, los agremiados de la (CNTE) no acudieron a las aulas para el inicio del ciclo escolar 2013-2014 dejando a unos dos millones de alumnos sin clase.
Las protestas se extendieron a los alrededores de la Segob, por lo que provocó el cierre de la circulación. Los docentes de la CNTE, que se oponen a la reforma educativa y exigen otras demandas, no dieron clases en Tabasco, Michoacán y Oaxaca.
En Oaxaca, al menos un millón 300 mil niños oaxaqueños no comenzaron su ciclo escolar, debido al paro indefinido de los maestros afiliados a la Sección 22 de la CNTE.
En Michoacán, la CNTE cumplió con el paro, y José Ortega Madrigal, líder de la Sección 18, estimó que la suspensión de clases podría superar las 7 mil escuelas públicas del nivel básico, de las casi 11 mil que tiene la entidad.
La Ciudad de México siempre será el centro de atención de todas las organizaciones sociales y sindicatos de las 32 entidades federativas para hacer sus manifestaciones, a pesar de que algunos problemas no son de índole federal sino estatal.
Más de cinco mil maestros en conjunto con integrantes del barzón, conflictuaron la capital del país generando un verdadero un caos vehicular.