Artistas independientes y trabajadores de la Cultura en el Distrito Federal denunciaron una feroz persecución de la Secretaria de Cultura del Distrito Federal, Lucía García Noriega y Nieto, tras diversos servidores públicos de la institución a su cargo, luego de que se realizaron encuentros con autoridades del Gobierno capitalino para acordar la reinstalación de las actividades canceladas durante su gestión.
Dieron a conocer que luego de la destitución del maestro Ricardo Fuentes, director general del Centro Cultural Ollin Yoliztli, por sospechar que fue él quien estuvo detrás de las quejas de los trabajadores de las orquestas, se han hecho llegar amenazas veladas contra la dirección de las Fábricas de Artes y Oficios (Faros), contra diversos trabajadores de los Centros Culturales José Martí y Xavier Villaurrutia, así como un clima de hostigamiento en toda la dependencia.
Alertaron sobre la posibilidad de que antes de que concluya el presente año, Lucía García Noriega y Nieto incremente el número de despidos en la institución, que hasta el momento llega a más de 200 , y expresaron que con esa política persecutoria es comprensible que nadie quiera externar su punto de vista contra la actual administración, ya que se arriesga a ser destituido.
Por otro lado, los artistas y trabajadores celebraron que el diputado Fernando Delgado, presidente de la Comisión de Cultura de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal ALDF, haya enviado una carta al Jefe de Gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera, en la que se solidariza con los miembros del sector cultural que convocaron a una movilización para exigir la destitución de la titular de Cultura Lucía García.
Estas afirmaciones y los hechos recientemente expuestos ante representantes del Gobierno del Distrito Federal, demuestran que aun cuando Lucía García Noriega tenga el apoyo de 50 connotados artistas capitalinos, su política cultural es errada y urge que sea sustituida por alguien con un perfil distinto y sensibilidad social, que revierta el deterioro en que ha caído la cultura en la Ciudad de México.