LIC. LUISA MARÍA ALCALDE, SECRETARIA DE GOBERNACIÓN:
"Régimen autoritario: sistema dependiente del dirigente, con un pluralismo escaso": Juan Linz
Lo que ocurre en el TEPJ es de una gravedad que, al parecer, usted no alcanza a ver; porque si efectivamente lo ve y sigue adelante, me pregunto dónde está su fibra democrática
Los tiempos han cambiado, ni duda cabe. Muchos dicen que MORENA se está comportando como el viejo PRI, pero no es así. Como diría el clásico, “discúlpeme, pero perdóneme”; MORENA se conduce siguiendo el talante autoritario del presidente y no tiene el mínimo decoro de guardar las formas, como sí lo hacían los priistas. Nada de consensos, nada de negociaciones; sólo los designios del inquilino de Palacio Nacional cuentan.
Así me entero de que usted solicitará juicio político contra el juez federal Rodrigo de la Peza, por haber resuelto que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) debe llenar las dos vacantes que hay en las magistraturas de la Sala Superior, a fin de que el Pleno se encuentre completo para dictaminar sobre los resultados de los comicios.
¿Juicio político? ¡Caray, doña Luisa María!, cómo les gusta enseñar el cobre a los de la 4T. Con todo respeto, como dice su jefe, me permito recordarle que si hay dos vacantes es porque los senadores morenistas reiteradamente se negaron a aprobar a alguno de los 12 candidatos que en octubre de 2023 envió la Suprema Corte de Justicia de la Nación. ¿Y sabe por qué? No fue por falta de preparación y experiencia; tampoco porque no hayan demostrado sus conocimientos en las comparecencias ante la Corte; fueron rechazados porque no cumplieron con la premisa de “90% lealtad y 10% capacidad”.
Todavía este año, ya con el proceso electoral iniciado, la actual presidenta del TEPJF, Mónica Soto, volvió a solicitar al Senado los nombramientos, pues además de las dos vacantes en la Sala Superior, los morenistas dejaron pendientes otros 49 nombramientos para las salas regionales. No me queda claro doña Mónica hizo la petición por convicción o para “taparle el ojo al macho”, como diría mi abuela. El caso es que los senadores guindas se rehusaron a convocar un período extraordinario para dirimir los casos.
Usted como abogada que es, doña Luisa María, debe saber que la insistente negativa de los legisladores morenistas de cumplir con lo que les mandan la ley y la Constitución, se llama desacato y que un juez está facultado para ordenarles que se dejen de tarugadas. El caso del TEPJF no es el único; también obstaculizaron sus correligionarios los nombramientos en otras siete instituciones por la sencilla razón de que estarían obedeciendo las indicaciones de Palacio Nacional de dejar mochos a los contrapesos.
Dígame, señora secretaria, ¿quién se merece el juicio político: los morenistas que se rehusaron a cumplir con su obligación senatorial o un juez que les ordena llevar a cabo sus obligaciones?