En fin, Marcelo, si ayer te expuse un panorama sombrío, hoy solo me queda repetir lo que decía mi abuela: que Jesús
nos agarre confesados
LIC. MARCELO EBRARD, SECRETARIO DE ECONOMÍA:
" Bullying: abuso de poder y discriminación hacia otros. Bravuconería": Word Reference
Con la pena y novedad de que ya nos la sentenció Donald Trump.
“México nos está invadiendo,” aseveró en su último día de campaña. “Pero ahora tenemos una nueva presidenta en México. Se supone que es una mujer muy agradable, según dicen. No la conozco. Y le voy a informar el primer día o antes que si no detienen esta avalancha de criminales y drogas que entran a nuestro país, voy a imponer inmediatamente un arancel del 25% a todo lo que envíen a Estados Unidos”.
Lamentablemente, por más disruptiva que suene tal afirmación, viniendo de Trump todo es posible. Nada más te cuento, Marcelo, que don Donald afirma que arancel “es la palabra más hermosa del diccionario. Más hermosa que el amor, más hermosa que el respeto”.
Independientemente de definiciones, los aranceles parecen una idea fija en la mente trumpiana para poner un alto a los temas que considera perjudiciales para EUA, desde la guerra de Ucrania hasta doblar a su vecino y principal socio comercial. La 4T llegaría a estar esperanzada a que tal decisión podría recurrirse en los paneles de arbitraje del T-MEC y hasta en tribunales comerciales internacionales, pero eso toma tiempo.
O también a que una medida tan radical sería un balazo en el pie para la economía estadounidense, pues se incrementarían los precios al consumidor. Viniendo de don Donald, todo es posible, máxime si está en modo reloaded, como lo expresó su ex estratega Steve Bannon. Valdría la pena que la 4T analizara las palabras del principal asesor de Trump en la materia, Brian Hughes: “Las políticas de Trump impulsarán el crecimiento, reducirán la inflación, inspirarán la industria estadounidense, todo mientras protegen a los hombres y mujeres trabajadores de nuestra nación de políticas desequilibradas que favorecen a otros países” (The Washington Post, 3/11/2024). O sea, el proteccionismo puro y duro; si las medidas ocasionan una guerra comercial en gran escala, mala tarde para todos.
En cuanto a la migración, pues ya sabemos que el republicano ha tomado este tema como eje de toda su campaña y ha criticado ampliamente la política de Joe Biden al respecto. Lo cierto es que los ciudadanos estadounidenses ven a los migrantes como una amenaza real al american way of life. Curiosamente y a fin de no darle un victoria al presidente Biden, fueron los legisladores republicanos quienes impidieron la aprobación del proyecto de ley para la seguridad fronteriza, mediante la cual se invertirían miles de millones en tecnología y personal para atender a los solicitantes de asilo, así como para perseguir y repatriar a los indocumentados.
Respecto de México y la migración, el republicano podría empezar por aplicar el impuesto extraordinario a determinados productos mexicanos. No olvidemos cómo ya en el pasado pretendió poner un arancel adicional al acero mexicano si México no enviaba a la Guardia Nacional a la frontera para contener el paso de los migrantes.
Ahora bien, cabe preguntarse qué satisfaría a Trump en cuanto al control de la migración, dado que la gran mayoría de los indocumentados provienen de países distintos a México y, por tanto, debiera ser responsabilidad de otros. Justo es reconocerlo, el expresidente López Obrador sí se hizo cargo de contener los cruces ilegales desde la frontera nuestra con Guatemala. Baste recordar que el número de cruces fronterizos ha llegado a un punto bastante bajo, pues se acuerdo con datos de la oficina de Protección Fronteriza y Aduanas, pasó de 250 mil en diciembre de 2023 a 59 mil incidentes en septiembre de este año.
Por cierto, esperemos que la actual administración negocie con quienquiera que llegue a la Casa Blanca que haya un plan de ayuda para repatriación de indocumentados, porque encima de que se está haciendo el trabajo sucio para EUA, le cuesta a nuestro país atender y enviar a sus países de origen a los migrantes.
Y ahora que Donald Trump anda tan envalentonado, convendría recordar lo dicho durante una entrevista con Fox News en el sentido de que estaba dispuesto a bombardear a los cárteles de la droga dentro de territorio mexicano. Esto sí que fue descabellado, incluso para él, por lo cual no lo ha repetido; sin embargo, sí ha reiterado estr dispuesto a hacer lo que sea necesario para recuperar “nuestro territorio, restauraremos las fronteras soberanas de los Estados Unidos de América y sacaremos rápidamente del negocio a los cárteles. Se van a ir”. Eso supondrá enormes presiones para México, empezando por la palabra favorita de Trump: aranceles.
En fin, Marcelo, si ayer te expuse un panorama sombrío, hoy solo me queda repetir lo que decía mi abuela: que Jesús nos agarre confesados.
Con la colaboración de Upa Ruiz
X: @upa_ruiz
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X: @Lmendivil2015