(Primera de dos partes)
Desde la época prehispánica, México ha hecho importantes aportaciones al mundo culinario, tales como el aguacate, el nopal, la flor de nochebuena, el chocolate y el cacao, que fue tan preciado entre las culturas olmeca,
maya y azteca, que incluso era utilizado como moneda de cambio.
Actualmente, nuestro país brinda al turismo –nacional y extranjero– la oportunidad de conocer y disfrutar de una variada oferta gastronómica, que dependiendo del lugar de origen, le agrega sus propios ingredientes para sorprender paladares con nuevos aromas, colores y sabores. Por ello, como parte esencial de cualquier viaje, en Nuestro recomendamos las 10 rutas gastronómicas que todo turista debe saborear.
Entre viñas y aromas del mar
Baja California y Baja California Sur
Debido a su ubicación geográfica, rodeadas por el Mar de Cortés y el Océano Pacífico las Bajas Californias tienen como base productos del mar y es por ello que varios de sus platillos típicos son preparados de pescados y mariscos.
Oferta gastronómica: Langosta con frijoles, ensalada César (creada por el chef Caesar Cardini), pescado al disco, almeja tatemada, escabeche de mariscos, tamales fajados y “Margarita”, el coctel más representativo y famoso de México.
Imperdibles al paladar
- En las cervecerías Tijuana y Tecate se puede conocer (de primera mano) el proceso de elaboración, así como la degustación de esta espumosa bebida. Otro de los imperdibles de Tecate es su pan que es preparado en hornos de ladrillo, alimentado con leña que conforma una tradición de artesanos panaderos.
- Puerto Nuevo (ubicada a 50 km al sur de Tijuana por la carretera Federal 1) es una comunidad restaurantera, en donde más de 30 establecimientos ofrecen exquisita langosta acompañada de frijoles y arroz y tortillas de harina.
- Valle de Guadalupe alberga múltiples casas vinícolas como Hacienda La Lomita, Cava Maciel y Domecq, en donde reservar catas resulta una obligación al paladar. Además, al entrar a los restaurantes es indispensable probar el tiradito de abulón, uno de los platillos más tradicionales.
- En la Rumorosa, en la Cabaña del abuelo se ofrecen especialidades como perdiz (ave migratoria) o conejo; todo acompañado de tortillas de maíz recién hechas.
- El restaurante La Guerrerense, ubicado en la calle primera y Alvarado puede elegirse de entre 14 diferentes tipos de ceviche que incluyen erizo y pepino de mar, aderezados por las salsas de la casa.
- El postre está en San Antonio de las Minas, ubicado sobre la carretera Federal 3 de Ensenada, ahí debe probarse el pastel de manzana, preparado con manzana verde.
LA MESA DE LA HUERTA Y EL MAR
Sinaloa
Hablar de Sinaloa es hablar de uno de los estados de la República en donde mejor se conjugan la inmensidad del mar y sus playas con las altas montañas y vastos sembradíos. Gracias a la variedad de vegetales y animales que hay en la región, en Sinaloa se puede encontrar platillos a base de plantas exóticas, aves, peces y mariscos.
Oferta gastronómica: Pescado zarandeado, callo de hacha, ceviche de pescado, aguachile y chilorio.
Imperdibles al paladar:
-En el restaurante Los Mochis Aguachile, ubicado la carretera Mochis-Ahome km 4, Dolores Castro, podrás degustar de este tradicional platillo, cuyo ingrediente principal son los camarones.
-Uno de los platos más representativos de la cocina local: el "chilorio", preparado con carne de cerdo deshebrada y freída con distintas especias, que se acompaña con tortillas de harina es la especialidades del restaurante La Casa Country ubicado en la Zona Dorada de Mazatlán, en Av. Camarón Sábalo esquina Av. Del Tiburón.
-El municipio de Mocorito, ubicado a tan solo unos kilómetros de Guamuchil, es la capital de los postres, ahí puedes probar el rico jamoncillo o dulce de leche, las conservas y piloncillos derivados de la caña.
-El Farallón es un restaurante símbolo de la región norte de Sinaloa, con sucursales en Los Mochis y en Culiacán, reconocido por la preparación del típico callo de hacha, camarones almendrados y el famoso pescado zarandeado, entre otras delicias.
-En el Pueblo Mágico “El Fuerte”, ubicado al noroeste de la capital, podrá apreciar la preparación y degustar los tacuarines o coricos (galletas de maíz en forma de rosca) y tortillas de harina únicas de la región.
QUESO Y VINO
Querétaro
Querétaro tiene una ubicación geográfica privilegiada, cuyo territorio semidesértico le brinda las características idóneas para la producción de queso y vino. Aquí se encuentra la segunda zona vitivinícola más importante del país y los viñedos más meridionales del hemisferio norte, al tiempo que integra a productores de quesos artesanales y restaurantes.
Oferta gastronómica: Gran variedad de quesos y vinos.
Lo que no se debe perder:
-Recorridos guiados por las cavas para conocer los procesos de elaboración de vino y degustar vinos en las casas productoras que se asientan entre Tequisquiapan y Santiago de Querétaro.
-El Museo del Queso y el Vino, fundado por dos importantes casas de quesos y vinos: Quesos Vai y Cavas Freixenet (ubicado en Salvador Michaus s/n, en el centro de Tequisquiapan a espaldas del templo principal), ofrece una selección de diferentes quesos acompañado del vino de tu preferencia. Horario de 10:00 a 20:00 horas.
- Si quieres disfrutar de un típico postre la tradicional cafetería La Charamusca te ofrece delicias como pastel de queso con zarzamora.
- En Tequisquiapan puedes tomar un tour para experimentar la producción y degustación de quesos, conocer y aprender de pastoreo de ovejas, el tipo de alimentación que reciben y el procedimiento de ordeña.