La Cámara de Diputados aprobó adicionar un tercer párrafo a la fracción III del artículo 52 de la Ley de Migración, para establecer que el extranjero en calidad de visitante regional, no necesitará visa cuando su ingreso a territorio nacional tenga la finalidad de recibir servicios de turismo de salud.
El documento avalado con 372 votos y enviado al Senado de la República para sus efectos constitucionales, precisa que el periodo de estancia podrá prolongarse siempre y cuando haya un certificado médico expedido en términos de lo que disponga el Reglamento y demás disposiciones jurídicas aplicables.
Al fundamentar el dictamen, el presidente de la Comisión de Asuntos Migratorios, diputado Gonzalo Guízar Valladares (Encuentro Social), señaló que hoy tiene gran auge el servicio médico mexicano, pues “el gran potencial de los médicos profesionales, especialistas y médicos generales, generan más de seis mil millones de dólares a partir de 2010, es decir, es un ingreso de divisas”.
Anteriormente, la situación era al revés, pues los mexicanos tenían que viajar al extranjero, principalmente a Estados Unidos, para recibir servicio médico profesional de calidad.
Con la reforma, destacó, al extranjero que viene a recibir servicio médico se le considera turismo de salud o médico en un concepto internacional.
“Tenemos que aprovechar esta coyuntura y oportunidad, para darle facilidad a los extranjeros, de que cuando se trate de venir a recibir una atención médica con previa presentación de certificado médico en su recuperación del servicio que recibieron, puedan estar no solamente tres días, sino los días que sean necesarios para su recuperación”, añadió.
Guízar Valladares puntualizó que lo medular del dictamen en materia de turismo médico “es decirles a los que reciben el servicio que generan millones y millones de dólares en divisas, que pueden estar. La reforma, significa derrama económica, hospedaje, alimentación, sobre todo en las fronteras”.
La promotora de la reforma, diputada María Luis Sánchez Meza (PAN), resaltó que hoy en día por cuestiones médicas o estéticas, la salud es un importante generador de derrama económica a nivel mundial. Es una industria evaluada en hasta 100 billones de dólares y con una expectativa de crecimiento de hasta un 25 por ciento anualmente.
En México la economía que genera el turismo de salud puede fortalecerse con las políticas públicas adecuadas. La organización internacional “Pacientes más allá de las fronteras”, contabiliza hasta 1.1 millones de extranjeros al año, en su mayoría provenientes de Estados Unidos que vienen a consumir servicios de salud, procedimientos ambulatorios, servicios dentales, cirugías estéticas, servicios de spa y de bienestar.
Los estados de Baja California, Baja California Sur, Chihuahua, Jalisco, Nuevo León, Sonora, Tamaulipas, Quintana Roo y Yucatán, son las entidades federativas con mayor recepción de pacientes de todas partes del mundo que confían su vida a especialistas connacionales.
Abundó que son muchos los factores que posicionan a México como un destino idóneo. Su ubicación geográfica, mayor número de especialistas médicos, infraestructura y costos accesibles. “La derrama económica llegará al sector hotelero, restaurantero, comercial y de servicios. Esto, es lo que necesita el país: competitividad que se traduce en más dinero para las familias”.