Papeles de colores, lamparas de papel, paraguas tradicionales chinos y hasta corazones con leyendas de amor, guían la entrada a la aldea china de Liujiachuang,
la cual todavía conserva los decorativos del día de los enamorados.
Con apenas 280 familias, la pequeña localidad mantiene los vestigios de la celebración que se llevó a cabo hace unos días, sin embargo, ya comienzan a reemplazar los coloridos corazones y flores de papel mache por aquellas decoraciones necesarias para el festival “Qingming”.
Este lugar que se ubica en la provincia de Shaanxi, a unos cuantos metros de la tumba del emperador amarillo, recibe alrededor de nueve mil turistas al año, siendo este su principal foco económico.
Y es que, gracias al turismo, las familias de esta aldea han visto un incremento en sus ingresos y calidad de vida, y muchos han dejado de laborar en el campo y ahora son dueños de su propio negocio, afirmó Song Lin Feng, representante del partido comunista de Liujiachuang.
Porque la aldea china de Liujiachuang ha destacado por cimentar su oferta turística en la cultura tradicional china, además de la gastronomía y su apuesta por el ecoturismo.
“Queremos ofrecer otro tipo de turismo, uno que incluya mas experiencias como aprender a realizar los alimentos tradicionales chinos, probar la gastronomía local, apreciar la flora y fauna de la zona, montar a caballo e involucrase en las diferentes tradiciones chinas", detalló.
Entre los turistas que llegan a la zona, los más frecuentes son las parejas jóvenes y en su mayoría, residentes de la misma provincia, que visitan la aldea, sobre todo durante la fiesta de primavera.
Así, el turismo de la zona ha permitido que el ingreso per capita alcance los 16 mil yuanes al año, señaló Song Lin Feng, que también ha ayudado que los habitantes aprendan de otras culturas y aprecien y aprendan más de la suya.