El archipiélago portugués de Madeira se ofrece como destino no masificado con toda clase de actividades, como el senderismo, el deporte de aventura y el turismo de playas.
La isla de Madeira cuenta con 57 kilómetros de largo y 22 de ancho, un espacio alejado de todo y con diferentes ofertas de ocio pero sin masificación para aquellos que quieran optar por un turismo alejado de la covid-19. Además, las autoridades del archipiélago han anunciado recientemente que cubrirán todos gastos a los turistas que se contagien del virus.
1- Pico Ruivo
Esta es la cúspide más elevada de la isla, a la que se puede llegar a través de un sendero en una hora y media, si se elige la ruta más corta; o de cuatro horas, si se opta por el más largo. A sus 1.861 metros de altitud, Pico Ruivo es el punto más elevado de Madeira y ofrece vistas a diversas poblaciones de la isla.
“Los que alcanzan la cima tienen como recompensa disfrutar de unas formaciones rocosas espectaculares y grandes hectáreas de bosques frondosos con el añadido de hacerlo casi en solitario”, ha destacado la plataforma Descubre Madeira en un comunicado.
2- Rincones escondidos a orillas del mar
Madeira es conocida como “la perla del Atlántico”, uno de sus motes motivado por sus playas y calas. Una de las más destacables es la playa de Garajau, a la cual se puede acceder en teleférico con reserva y pago previos. Forma parte de la Reserva Natural Parcial de Garajau, con lo que allí se puede disfrutar de las aguas del Atlántico estando rodeado, desde las alturas, por una gran extensión de vegetación.
Otra playa recomendable es Ribeira Natal. Desde allí, se puede llegar caminando a las playas de Caniçal, un pequeño pueblo pesquero a 30 kilómetros de la capital, para conocer una parte de la isla aún más auténtica.
3- Adrenalina y aventura con el particular sello de Madeira
El archipiélago también destaca por su oferta deportiva, un atractivo para los amantes del surf, el buceo o la escalada.
Para los fanáticos del surf, el imprescindible es la playa da Enseada, donde se han celebrado competiciones de prestigio como el Red Bull Big Wave Challenge en 2000 o el Campeonato Mundial de Surf en febrero de 2001.
Para quien prefiera sumergirse en el mar, la playa de Garajau es la más solicitada para los buceadores, ya que sus aguas cristalinas permiten disfrutar mucho más de la diversidad marina.