La teoría predominante acerca del nacimiento de la Luna, corroborada de nuevo por un estudio hecho público la semana pasada, dice que nuestro satélite natural se formó hace unos 4.500 millones de años, cuando un cuerpo planetario del tamaño de Marte y que es conocido como Theia chocó violentamente contra la Tierra. De acuerdo con esta hipótesis, el calor generado por la colisión habría provocado que nuestro planeta entero se derritiera. Algunos de esos restos se enfriaron y salieron disparados para terminar formando nuestro satélite natural.