Obsesión por el agua
Beber entre dos y tres litros de agua al día es lo que una persona normal tiene que hacer para mantener una buena hidratación y por tanto, una correcta salud y nutrición. ¿Pero qué sucede cuando la ingesta de líquidos se convierte en una obsesión? Deriva en un trastorno poco conocido: “potomanía” o “polidipsia psicogénica”.