La singular Plaza de la Concordia
En el año 1748, el rey francés Luis XV se restableció de una enfermedad que lo aquejaba y, para halagar al soberano y celebrar el feliz suceso, los regidores y comerciantes parisinos decidieron erigirle una estatua ecuestre, para lo cual convocaron a un concurso en el cual participaron 19 arquitectos proponiendo el mejor emplazamiento. Ange – Jacques