Aún no gobierna, es más ni siquiera tiene la constancia del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación,
-TEPJF-, es todavía, candidata ganadora, y nada más. Ya la soberbia le esta ganando a Claudia Shreinbaum, desplantes innecesarios, actitudes, que, sin embargo, la pintan de cuerpo entero.
La “científica”, la doctora, la afamada triunfadora, demuestra su pequeñez humana, al actuar como remedo de su progenitor político. Sin ningún tacto, rechazó, sólo porque sí, reunirse con la presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la nación, -SCJN-, la Magistrada Norma Piña.
La doctora Sheinbaum, viene decidida a implementar las ocurrencias y venganzas de AMLO, y como lo ha sostenido está columna, es peor que el presidente saliente.
Claudia Sheinbaun Pardo, supone que los mexicanos todos, le creemos y avalamos sus millones de votos, obtenidos con trampas y compra de votos.
Los programas sociales que tanto presumen los morenistas, serán su tumba, al momento que ya no haya dinero en las arcas para esos programas.
La deuda que podría contratar la doctora, sería, según cálculos de los especialistas, rondaríael triple de lo contratado en el sexenio que fenece.
El partido Morena, confía en la sobrerrepresentación ilegal en las cámaras del Congreso de la Unión, la ley les estorba, no la respetan.
La futura presidenta, representa el ala dura de la izquierda comunista de Morena, representa la corrupción sofisticada, disfrazada de amor al pueblo.
Creer en la señora Sheinbaum, es un error irremediable, no se le puede dar el beneficio de la duda, a quien representa la dictadura.
México, ha vivido el sexenio de López Obrador, en la zozobra, en el miedo, bajo la amenaza de un presidente autocrático y manipulador.
Pero, lo que viene con Claudia es el doble de peor y de peligroso, la señora Sheinbaum, tendrá un poder ilimitado.
A nadie convenía en este país, una votación que le diera ha un solo partido, tanto poder, es una locura, es como haberle entregado la pirotecnia al pirómano.
Duele nuestro México, tanto saqueo, tanta corrupción, lo mismo de un partido que de otro, da igual se llamase como fuere, ninguno pensó en la ciudadanía-
Algunos ingenuos, aún creen que los EEUU, darán un manotazo en la mesa, lo cierto es que no será necesario, con las demandas por incumplimiento de los acuerdos comerciales, será suficiente.
Ya vimos de que tamaño es la soberbia de la doctora Claudia, ya tenemos una probadita de lo que nos espera en los próximos seis años.
Con la “científica” las cosas se complicarán, lo simple, lo tornará en un galimatías del que no encontraremos ninguna solución.
La escasez de medicamentos, la ausencia de insumos básicos en los hospitales de salud pública, será más grave.
No habrá muchas cosas porque México no tendrá manera de importar, y tampoco tendrá forma de producir, la noche más oscura viene con Claudia Sheinbaum Pardo.
Quienes presurosos otorgaron sus votos a Morena y a Claudia, serán los primeros en llorar, porque efectivamente, “primero los pobres” pero para joderlos.
Pobre Claudia, se jodió y con ella, se envuelve al país entero, pobre México.
Hasta la próxima.
Jesús Corona Osornio
@coronaoso
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Periodista, Psicoanalista, Director de Analítica Lacaniana, autor de El Acento Periodismo. Miembro de la Academia Nacional de Periodistas de Radio y Televisión. con más de 37 años ejerciendo el periodismo en México.