Entrar a los BRICS es un reto inaceptable para el gobierno estadounidense, si bien es cierto, México es un país
soberano y puede tomar sus propias decisiones.
La desventaja para nuestro país es que somos la frontera más cercana y con más de tres mil kilómetros de separación, y somos el socio comercial número uno para los americanos.
No es poca cosa, además la señora Sheinbaum, ha sostenido que la cuarta transformación es de izquierdas, lo mismo a socialismo.
Las recientes modificaciones a la Constitución, la elección de jueces y magistrados por voto ciudadano, el cambio a la Ley de Amparo, no han caído bien del otro lado de la frontera.
Los cambios a la CFE, que ahora será la preponderante en la generación de electricidad, y tantas otras cosas no menos importantes, la relación comercial con China.
La relación con Rusia que desde el 2018 se ha estrechado, la protección a Cuba, Venezuela y Nicaragua, nada de eso es del agrado ni para los demócratas ni para los republicanos.
Los temas con los EE.UU., no son pocos y todos son de suma importancia para ambos países, tal como lo ha sostenido esta columna, a los mexicanos nos espera una grave crisis económico-financiera, más fuerte que en 1994.
La política interna tampoco está exenta de tropiezos, a pesar de las mayorías en las cámaras de senadores y diputados, las cosas se complicarán a los morenistas.
La escasez de dinero para los programas sociales, despertará al león, los organismos internacionales podrían negar a nuestro país los prestamos solicitados por el gobierno.
La primera acción del gobierno de Trump en relación a nuestro país, será el cierre de fronteras y la expulsión de miles de ilegales que serán deportados a nuestro territorio fueren o no mexicanos.
El gesto del populismo más vil y canalla ha sido el de la señora Sheinbaum, al decir que la llamada para felicitar al presidente Trump, fue muy cordial y amable.
Luego de esa llamada Ramón de la Fuente y Marcelo Ebrard, el primero Secretario de Relaciones Exteriores y el otro de Economía.
Fueron llamados de prisa, urgentemente, ¿por qué?, si la llamada fue tan cordial, de mero tramite, los dos secretarios encargados de tejer el acuerdo con los BRICS, fueron tan necesarios.
En Palacio Nacional hay nerviosismo, aun cuando la señora Sheinbaum en su soberbia extrema, supone que podrá navegar en dos aguas, el TEC-MEC y los BRICS.
Los errores de la señora presidenta en cuanto a las relaciones internacionales, son de percepción, de interpretación.
De la Fuente no tiene el roce internacional de Ebrard, Marcelo juega para él, es un tipo de cuidado, el tiene el derecho de picaporte con el yerno de Trump, sin embargo se desconoce que papel jugará en los planes de su suegro.
Impredecible en sus arrebatos y caprichos, Trump es como chivo en cristalería, no le importan las formas, es un peleador sin reglas.
Los de Morena, incluida la señora presidenta, no entienden de geopolítica, no entienden de relaciones internacionales y además les importa un carajo.
Hasta la próxima.
Jesús Corona Osornio
@coronaoso
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Periodista, Psicoanalista, Director de Analítica Lacaniana, autor de El Acento Periodismo. Miembro de la Academia Nacional de Periodistas de Radio y Televisión. con más de 37 años ejerciendo el periodismo en México.