Humberto Montoya N.
Serias deficiencias, desviación de recursos, manejo discrecional y opacidad, fueron algunas de las anomalías detectadas en el análisis de fiscalización de la Cuenta Pública 2011 de Estados y Municipios del país, junto con demarcaciones territoriales del Distrito Federal, llevada a cabo por la Auditoria Superior de la Federación –ASF- con supervisión de la Mesa Directiva de la Comisión de Vigilancia y la Unidad de Evaluación y Control de la Cámara de Diputados, que preside Juan Muñoz Soria. En el informe, dado a conocer en el Palacio Legislativo de San Lázaro por el titular de la ASF, Juan Manuel Portal, se asienta que en el periodo señalado el gasto federativo ascendió a 1.2 billones de pesos cantidad que significó el 32.4 por ciento de la erogación total del sector público, que a su vez significó el 90 por ciento del total de los ingresos de las entidades estatales y municipales,