Tras inaugurar un distribuidor vial en la ciudad de Chihuahua, el presidente Enrique Peña Nieto, aseguró que con las reformas estructurales México tiene un horizonte más confiable para el desarrollo de infraestructura y la atracción
de más inversiones.
En la capital del norte del país, el primer mandatario indicó que la construcción de carreteras, autopistas, puentes, vías de ferrocarril, puertos, entre otras obras elevan la productividad de la nación al reducirse a su vez los costos de producción.
“Necesitamos construir mayor infraestructura para atraer inversiones al país”, exclamó.
Junto a los gobernadores de Chihuahua, César Duarte y de Nuevo México, Estados Unidos, Susana Martínez, externó que la política económica de México “ no es sólo nacional, sino internacional al considerar que la finalidad es que toda Norte América sea más competitiva.
“La relación México- Estados Unidos ya no es monotemática, ahora se ha convertido en motor para hacer una región más competitiva”, dijo.
Sobre el Libramiento Oriente de la ciudad de Chihuahua recordó que este tiene una longitud de 42.3 kilómetros de largo, 12 metros de ancho y el cual costó alrededor de mil 600 millones de pesos por donde podrán circular más de 10 mil vehículos al día.
Por último habló sobre las reformas estructurales, recalcando que estás generarán en un corto plazo mayor bienestar para la sociedad. “Nosotros como país debemos crear una economía digna para todos”, recalcó.
Indicó que con las enmiendas constitucionales se reducirán los precios de los bienes y servicios que se ofertan en el país, propiciando mayor crédito para las empresas y personas.