México despide a Gabo

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Los años de Macondo suenan, suenan en el aire escribió el compositor Oscar Chávez para conmemorar al Premio Nobel de Literatura 1982, Gabriel García Márquez quien falleciera el pasado jueves a la edad de 87 años y fuera recordado por los presidentes de México, Enrique Peña Nieto y de Colombia, Juan Manuel Santos en el Palacio de Bellas Artes con una ceremonia

solemne.

Junto a miles de personas que admiraron la pequeña urna de cenizas que se colocó frente a las escaleras del teatro de la ópera, los primeros mandatarios recordaron a su manera al quien fuera el creador de Cien años de soledad, el Coronel no tiene quien le escriba, El amor en tiempos del cólera y otras obras que dieron a conocer el pensamiento latinoamericano en el mundo.

Acompañado de su esposa Angélica Rivera, el director de Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), Rafael Tovar y de Teresa entre otros funcionarios México-Colombianos, el ejecutivo mexicano explicó como si fuera un prócer de la cultura la trayectoria del escritor sudamericano.

Expresando sus condolencias a la esposa del fallecido y creador del mítico pueblo bananero que lideraba Úrsula 100 años, Mercedes Barcha, el presidente mexicano aseguró que García Márquez fuel el mayor novelista de todos los tiempos.

“García Márquez ha sido el mayor novelista de todos los tiempos el cual nunca olvidaremos en Latinoamérica”, apuntó.

Mientras presentaba y recitaba los ensayos del escritor colombiano, Peña Nieto recordó a los presentes que el colombiano fue acreedor al Premio Nobel de la Paz en 1982, convirtiéndose en pilar fundamental de la cultura de América Latina, región a la que calificó de contrastes.

Bajo el techo del inmueble histórico con forma Art Decó, dio a conocer pasajes de la vida de García Márquez como la lectura de su libro favorito el cual era Pedro Páramo, el cual leyó varias veces, entre otras novelas significativas para el escritor y periodista.

“Recordaremos siempre a Gabo” , replicó varias veces el primer mandatario mexicano aseverando que los nosotros nos sentimos orgullosos de que otro Premio Nobel viva en nuestro suelo.

“ Al escritor Márquez le encantaban que toda la gente le dijera que México era su segundo hogar”, apuntó.

Detalló que para el escritor y su familia México fue una tierra de oportunidades que le permitió crear historias fantásticas las cuales aseguró que nunca se olvidarán.

“En México encontró espacio y oportunidad para afinar su vocación, es un orgullo que el escritor haya vivido aquí”, recalcó.

MÁRQUEZ, EL MAYOR COLOMBIANO DE TODOS LOS TIEMPOS

Sin planear una visita de Estado y sin los actos protocolarios indicados, el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos dijo ante los próceres de la cultura y su homólogo Mexicano, Enrique Peña Nieto que Gabriel García Márquez es el mayor colombiano que ha existido.

“ Gabo es referencia para los mexicanos, pero para los colombianos es el mayor colombiano de todos los tiempos”, apuntó.

El ejecutivo federal sudamericano dio a conocer las grandes similitudes que existen entre México y Colombia, aseverando que las novelas del escritor unieron a ambos países desde hace muchos años atrás.

“ Gabo nos dejó para unir más a México y Colombia, Amérca Latina supera su soledad”, explicó.

GABO MURIÓ COMO ESCRIBIÓ, RAFAEL TOVAR Y DE TERESA

El director del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), Rafael Tovar y de Teresa tras inaugurar el homenaje luctuoso de Gabriel García Márquez dijo que el escritor colombiano murió como escribió en Jueves Santo, con una luna roja que trajo un terremoto y una granizada épica.

Destacó que el novelista siempre vivió a plenitud, logrando una armonía con su familia, teniendo una familia extraordinaria; una esposa excepcional, que lo acompañó desde 1958, como dicen las reglas sociales: en lo próspero y en lo adverso.

Finalmente al recordar el legado del periodista destacó que su literatura no tiene límites y que seguirá existiendo durante los años posteriores.

"Es la vida, más que la muerte, la que no tiene límites". Sus libros, su legado, su invaluable regalo al mundo, tampoco tienen límites”, puntualizó.

 

 

MILES SE DESPIDEN DEL AUTOR DE CIEN AÑOS DE SOLEDAD

Miles de niños, jóvenes, adultos, abuelitos, trabajadoras, políticos, académicos, artistas y otros decidieron dejar sus labores cotidianas para poder entrar al recinto teatral que albergó los restos mortales del Premio Nobel de Literatura 1982 con su novela Cien Años de Soledad.

Tumultos y largas filas de un kilómetro de longitud se adueñaron de los alrededores de la casa representativa de la cultura mexicana de quienes deseaban fotografiar o tocar la urna que contenía las cenizas del también autor de El amor en tiempos del cólera.

Muchos de los presentes cargaban flores y novelas del autor como el Coronel no tiene quien le escriba para entregárselas a los familiares del prócer literario quien “ por causas desconocidas” migró a México para quedarse para siempre, por lo que grupos de música colombiana, mariachis y otros músicos interpretaron canciones que supuestamente le gustaba al autor.

En cambio, otros leyeron en público las novelas del también periodista en voz alta cuyas personas que se encontraban formadas decidieron participar en el taller literario, muchos de ellos llevándose los aplausos de los miles de los presentes y la atención de los medios de comunicación.

Mientras miembros del Estado Mayor Presidencial y de la policía capitalina intentaban cortar la circulación de avenida Juárez, los admiradores de Gabriel García Márquez o Gabo como preferían que le llamaran gritaron “porras” con en su nombre que hacían retumbar el Centro Histórico del Distrito Federal.

Otros personajes “desconocidos” llevaron objetos que supuestamente le pertenecieron al escritor en sus tiempos de juventud, por lo que la comunidad colombiana en México comenzó a contar anécdotas de Gabriel García Márquez que los relacionaban.