UNO de mis amigos me hace el favor de enviarme, a lo mejor con algún mensaje para mí, un video que en su esencia dice: Están dos monjes tibetanos orando, y uno de ellos le comenta al otro: “Hermano todos los días que oramos tú tienes una grata sonrisa en la cara, en cambio yo, siempre tengo gesto adusto”. La
razón es sencilla, le contesta: “Lo que sucede que cada día que oramos tú pides, en cambio, yo, doy gracias por lo que recibo y tengo”… Y es cierto cada uno, en su enorme mayoría, creemos que la oración es para pedir y la realidad es que el Universo todo nos proporciona y no damos gracias por ello. Leía un gracioso artículo en EL UNIVERSAL, escrito por Magalli Delgadillo, el día 30 de agosto: “PAJARITOS, AHORA TE LEEN LA SUERTE… EN LAS CANTINAS” y eso me remontó a recordar que anteriormente muchos de esos “domadores de las fierecillas hermosas” laboraban en las calles y los mercados, y por cualquier centavo ponían a sus pajaritos (no sean mal pensados) a conocer la suerte y hacer gracias como ponerse un sombrerito o bailar o tocar algún instrumento en miniatura, el pajarero recibía la suma de los que pagaban y el pajarito, además de hacer varias gracias con ellos, entregaba dos sobrecitos donde estaba el presente y el futuro del solicitante y, el pajarito, solamente recibía una semilla como recompensa y no sé, pero me parecía que cada vez que tomaba la semillita agradecía por ella, por esa razón, también, me recordé de lo que decía mi padre: “Tengan confianza ya que el creador siempre proporciona el sustento para todos y así, hasta el pajarillo más sencillo, no se preocupa de nada porque siempre tendrá algo qué comer”, y la experiencia de muchos años me ha demostrado que, efectivamente: “Dios aprieta, pero no ahorca” y por ello, hay que agradecer.
Tenía una fuerte preocupación porque solicitaría un crédito para adquirir dos cosas importantes que necesitaban mis hijos menores con urgencia y era tal mi preocupación que recurrí a solicitarle a un querido amigo su intervención para con otro para que me apoyara para alcanzar el objetivo, era tal la angustia que esa noche no dormí y a pesar del cansancio pedía, pero no agradecía, de tener dos amigos que me estaban apoyando al igual que mi familia, y a pesar de ello, al otro día, recibía, y me di cuenta de mi tontería, pendejez, dicen en mi pueblo, y AGRADECÍ, y no tienen idea de la satisfacción y de la alegría de lograr eso por la intervención de mis amigos y familia, por esa razón comento la historia, porque es experiencia viva, y a lo mejor les servirá en algún momento. Más que pedir, hay que agradecer… es el camino.
ALGUNA OCASIÓN LEÍA QUE ALGÚN FILÓSOFO EXPLICABA QUE EL HOMBRE MÁS RICO ES QUIÉN NADA NECESITA y creo que el hombre también más rico es el que goza de buenos amigos, leales, de los que jamás necesitan muchas explicaciones porque los amigos de verdad no las necesitan de nuestra parte, y tener muy claro que por más explicaciones que uno brindes, los enemigos, jamás las creerán, son tan dogmáticos y necios como aquellos monjes que declaraban que la tierra era plana y ya, con lo que demostraban que los dogmáticos son tontos, porque no hay inteligente que pueda ser dogmático, y claro está que, los pentontos, jamás entenderán de lo que se habla. Por eso, tener amigos es una riqueza mayor porque podrás hablar con ellos y entenderte solamente con la mirada y saber que lo que dice, aun cuando no estés de acuerdo con ello, es dicho con la mejor buena fe y hay que reflexionarlo. Al paso der los años también he entendido que solamente puedes portar un calzón y no necesitas tener varias docenas, que solamente portas un pantalón y una camisa y que no se requieren muchos para vestir, que solo usas un par de zapatos por día y no requieres cientos de pares, que solo usas un reloj o un teléfono móvil y no se necesitan muchos para estar en el mundo y es por eso que entre más viejos somos no es que seamos más codos o tacaños, sino que ya no compramos por comprar, no somos presos de la cultura del consumismo y podemos entender mejor el mundo y la vida, y tal vez, por ello, es el mejor tiempo para tener algo en firme para lo que resta de la vida, no gastamos tan a lo pentonto y esto es la liberación interior y exterior que jamás entendimos.
Ahora entiendo aquella recomendación que me hiciera un político maduro e inteligente que era muy austero cuando me recomendaba leer muchas biografías y autobiografías de las gentes importantes en el mundo y el país, aclarando que al leerlas entendería su tiempo y circunstancia y entendería el por qué tomaron tal o cual postura o acción en su vida, algunas que les costaron la vida misma y lo más importante es que no andaban con aires de héroes de pacotilla ni querían encubrir en sus actos sus ambiciones personales y políticas, actuaban porque era necesario hacerlo y ya, eso era lo importante, por ello cuando veo a los lidercillos ocultos en los partidos que toman posturas redentoras, sé que lo único que hacen es encubrir sus ambiciones personales y políticas y es por ello que cuando llegan al poder lo mejor que saben hacer es: CAGARLA DE VERDAD, jodiendo a todo el mundo… son tiempos para reflexionar y para evitar cagarla o hacer que la caguen, esperando que se haga algo bueno para todos, cuando en la realidad, solamente, están haciendo el saqueo para ellos, usando los fondos y recursos públicos para hacer sus negocios privados, y no sé por qué me vino a la mente: Gabino Cué y Jorge, el coco, Castillo, entre otros muchos políticos ratas que hemos sufrido en el país…y que siguen en la impunidad… joder …para encabronarse de verdad.