Luego que Luiz Inácio Lula da Silva dijera que la gran promesa económica de México es una mentira, que todos sus indicadores son peores a los de Brasil y que los cambios que se pretenden hacer a Pemex su país los hizo hace 20 años, el Presidente Enrique Peña Nieto respondió que no se trata de una competencia entre las dos naciones.
"Tengo gran respeto para el señor Presidente Lula y la relación de España (sic) con Brasil es cercana. Creo que no se inscribe en una competencia de dos naciones", señaló en conferencia de prensa.
"Cada país, a su debido tiempo, ha impulsado cambios y reformas para promover su desarrollo".
El Mandatario defendió que México ha asumido decisiones propias de transformación y de cambio que deparen un camino de desarrollo para el País.
"Que aseguren crecimiento sostenido, sustentable, generación de empleos, combate a la pobreza, que son los grandes retos de la nación", añadió.
Peña afirmó que respetan la ruta que Brasil ha seguido por igual, lo cual, añadió, es referente en los casos de éxito de medidas adoptadas por otros países.
"Yo deseo que tanto a Brasil como a México les depare un futuro promisorio", expresó.
En un seminario del diario español El País realizado la semana pasada, el ex Presidente brasileño aseguró que la reforma energética en México no es ninguna hazaña.
"México fue presentado como la gran novedad del Siglo 21 y que estaba mejor que Brasil", dijo Lula.
"Pero me fui a enterar y todo es peor que en Brasil. No hay ningún indicador comparable a los nuestros. Quiero que México crezca, pero era mentira".