Los rumores fueron confirmados, este jueves a las 16:00 horas, arribó a la Base Aérea de Santa Lucía el nuevo avión TP01, Boeing Dreamliner 787, que será el transporte aéreo del presidente Enrique Peña Nieto durante su próxima gira al continente asiático.
Según fuentes de la Presidencia de la República, la aeronave costó 290 millones de dólares los cuales se pagan mensualmente. Cabe recordar que el ex presidente Felipe Calderón Hinojosa, solicitó renovar el descontinuado B-757, que ha transportado a presidentes mexicanos desde hace más de 25 años, mismo que será utilizado para otras funciones.
Además, el gobierno mexicano gastará 500 millones de dólares adicionales al precio pagado para labores de mantenimiento del avión durante los próximos 20 años; también se utilizaron otros 100 millones de pesos para remodelar el hangar presidencial para poder recibir al nuevo avión.
El 787 Dreamliner presidencial fue armado por la empresa Boeing en su fábrica de Everett, Seattle, considerada como el complejo industrial más grande del mundo el cual es sólo comparable con siete campos de futbol entrelazados; también es una de las plantas con más tecnologizadas.
Según la empresa estadunidense el 787 Dreamliner es el “avión del siglo XXI”, debido a que cuenta con sistemas de alta tecnología, navegación y seguridad para que el primer mandatario pueda viajar hasta 15 mil kilómetros, sin necesidad de recargar combustible, debido a que gasta 20 % menos que máquinas de tamaño similar.
La cabina de la aeronave cuenta con los últimos sistemas de radiocomunicación y navegación y puede comunicarse en pleno vuelo con cualquier terminal aérea en el mundo, mismos que son digitales y controlados por la computadora de la aeronave, evitando así la manipulación humana.
También tiene integrado un administrador de “plan de vuelo” totalmente digitalizado que le ayudará a los pilotos a seguir la ruta más adecuada y predecir los peligros a los que pueden enfrentarse, como son cambios de temperatura, fallas mecánicas o alguna situación de emergencia con los pasajeros.
El nuevo avión presidencial tiene dos motores ahorradores de energía que fueron fabricados por General Electric. Se trata de máquinas consideradas como las más avanzadas en su tipo y tienen la capacidad de reducir las emisiones contaminantes en un 50%.
La coraza del 787 es una combinación de aluminio y fibra de carbono que le da al avión más ligereza y mayor aerodinamismo, lo que le permite ahorrar grandes cantidades de combustible, es decir, puede cubrir la ruta México-Japón sin recargar.
Su fuselaje se divide en seis segmentos perfectamente equilibrados que le permiten al avión distribuir su peso de la mejor manera posible. Estos se encuentran unidos conforme a la presión de las piezas y no con soldadura, como ocurre en los aviones comunes.
También, el 787 privilegia el aerodinamismo del avión que por su forma radial puede utilizar las corrientes del viento para impulsarse y ayudar a los motores a no sobrecargarse, permitiendo que los mismos ahorren combustible.
En el caso de los interiores del avión, la empresa Boeing asegura que el pasajero que “lo pruebe” vivirá una experiencia inolvidable, por lo que su cabina tiene iluminación con focos tipo Led, la cual puede ajustarse a diferentes tipos de intensidades y colores.
Sus ventanas son 30% más grandes que la de un avión tradicional, además, los vidrios tienen una capa plástica que regula la intensidad de luz que entra al avión. También cuenta con guarda equipaje de 61 centímetros de profundidad.
Para proteger la salud de los pasajeros, el 787 tiene la capacidad de convertir el dióxido de carbono en oxígeno gracias a un proceso de alta tecnología por medio de ozono que remueve cualquier impureza en el aire.
Se destaca que la moderna aeronave tiene un sistema que disminuye la turbulencia, el cual, por medio de cálculos computarizados, distribuye el peso del aparato de manera uniforme evitando movimientos bruscos que puedan poner en peligro la seguridad de los usuarios.
Por lo anterior, el Presidente Enrique Peña Nieto podrá tener un avión“digno” para el representante de una nación; sin embargo, durante los próximos días, ingenieros del Estado Mayor Presidencial lo modificarán para asegurar la integridad del primer mandatario y sus acompañantes.