La renuncia del Director del Instituto Mexicano de Seguridad y Servicios
Sociales IMSS, Germán Martínez es un llamado a la responsabilidad de servidores públicos que no se limita solamente a un esquema de honestidad, sino además de eficiencia, a mantener una vocación de servicio y oficio político. La determinación del Director del IMSS de presentar su renuncia, se da en el contexto de una política pública hacendaria similar a la del mas puro gobierno neoliberal tan criticado durante el periodo del presidente Carlos Salinas de Gortari. Los recortes presupuestales y el adelgazamiento del aparato burocrático del Estado, exigencia del Fondo Monetario Internacional, obligó en su momento al gobierno de Salinas a adelgazar el aparato gubernamental, en su momento, se cerraron una gran cantidad de empresas paraestatales, lanzando al desempleo a muchos mexicanos, fue precisamente en ese sexenio cuando proliferó un mercado de economía subterránea, los tianguis se extendieron a lo largo y ancho de todo el país, muchos burócratas engrosaron las filas del desempleo y subempleo pasando a conformar una fuerte espacio de la economía informal, gran parte de esos recursos llegaron a los sectores más deprimidos disfrazados del programa SOLIDARIDAD, como parte de un proyecto político que buscó durante seis años la legitimación de su presidencia cuestionada en las elecciones frente a Cuauhtémoc Cárdenas.
El oxigeno que le proporciono al PRI en su momento el programa Solidaridad y la desafortunada muerte del candidato Luis Donaldo Colosio, le permitió ganar la presidencia.
El presidente López Obrador desde la Secretaría de Hacienda, está repitiendo el mismo esquema del Neoliberalismo que tanto critica, dirigiendo recursos también para quienes más lo necesitan pero a diferencia de Salinas, el mayor porcentaje de apoyos está encaminado a fondos perdidos y no a un programa sólido bien establecido para detonar la productividad.
La cerrazón de funcionarios de hacienda en el control de plazas, sustitución de personal preparado y con experiencia, por empleados fieles a MORENA sin capacitación, esta siendo el rasgo más representativo del actual gobierno, con el consecuente deterioro de la calidad de los servicios y la eficiencia terminal de los cometidos de la Administración Pública.
Lo mencionado en la carta renuncia del Director del IMSS no es otra cosa más que una respuesta valiente que refleja lo que está sucediendo no solo en el sector Salud, sino peor, aún en todas las dependencias del Poder Ejecutivo Federal, decisiones que no están apoyadas en un diagnóstico mínimo preliminar, que apuntale o sea preámbulo de un plan o proyecto congruente, que permita visualizar el proyecto a corto, mediano y largo plazo de la ruta que pretende seguir el actual gobierno, que tampoco queda muy claro en el Plan Nacional de Desarrollo 2019-2024.