FUERA CAFETERAS, HORNOS, VENTILADORES Y SENSIBILIDAD

 
Decisiones como la circular de la Cámara de Diputados de prohibir que tengan
hornos ni cafeteras y en otras dependencias prohibir cargar celulares, y ventiladores. Vaya, y los sindicatos en silencio. El golpe contra los trabajadores – y los sindicatos que corren el riesgo, si callan, de ser rebasados por las necesidades de sus agremiados y ser ignorados por los trabajadores a los que teóricamente representan y defienden – quienes llevan su comida para calentar o el café y lo peor ventiladores que mejoran las condiciones laborales, no lo hacen por gusto, ello es consecuencia de la distancia a sus hogares y tienen que comer en su trabajo, porque tampoco tienen dinero para ir a donde van los funcionarios de la 4T, absoluta insensibilidad.
Me pregunto si la circular para ahorrar obedece a que los hornos, cafeteras, ventiladores y minirefrigeradores en las oficinas, son fifís, porque se entiende que los pobres, como se ha dicho, que son como mascotas, no tienen cafeteras y menos ventiladores – aunque las condiciones de trabajo son responsabilidad del patrón – y para qué, si menos sabrían operarlas, eso es lo que motiva la circular de austeridad.
Si es así, entonces quién costea la remodelación del Palacio Nacional para que sea habitable, cuánto cuesta y qué incluye, con qué está pagado y en qué parte del presupuesto federal está etiquetado el costo de la remodelación.
Sería bueno que estudiaran un poquito – conste que digo poquito – algo elemental de administración pública, por ejemplo, de la teoría “Z” de los japoneses, que sostienen que a los trabajadores hay que tenerlos más cómodos que en su casa para que trabajen más y produzcan más, es un tema de ignorancia, no más, pero tampoco menos.
Es clarísimo el resentimiento contra quienes progresen, en México la regla es vamos a emparejarnos todos a ser pobres, mientras que en otros países los gobiernos luchan porque todos tengan más y privilegiar el trabajo y el talento, no la holganza y la pereza. 
Lo peor es que la mesa directiva es el patrón de los trabajadores de la Cámara de Diputados, mientras en otros países se ha superado la tesis marxista de que el patrón es enemigo del trabajador, las nuevas teorías demuestran que el patrón enriquecido no tendría forma de consumir o disfrutar de los beneficios de su capital, entonces procura compartirlos y como en Japón, que los trabajadores cada vez tengan mejores condiciones de trabajo y de bienestar, acá al revés, que no saben que cada legislatura se conoce por el trato al personal que labora ahí, no se entiende tanto pretexto para lastimar a los mexicanos. Porque quienes ahí laboran son mexicanos, o ¿quizá debieran ser indocumentados? Y sus salarios no son de millonarios, o ¿tampoco lo saben?
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