La Facultad de Derecho de la UNAM, evaluada como la mejor escuela de Derecho de universidades de habla hispana
y en el número 26 de todas las escuelas de Derecho en el Mundo, celebró el día del maestro con una comida a la que asistió la planta de profesores. Como dijo en el ofrecimiento del evento, el director Doctor Raúl Contreras Bustamante, es la última comida a la que asisten en su calidad de Director, pues termina su segundo período casi en el tiempo que se da también el cambio de Rector de la UNAM.
El Director, manifestó su preocupación por los tiempos de turbulencia por los que pasará la UNAM, pero se manifestó convencido que la facultad continuará fortalecida y con esa dinámica de trabajo y compromiso académico.
En un ambiente de cordialidad y compromiso con la UNAM y con México transcurrió el evento, también hizo uso de la palabra a nombre de los profesores la maestra Rigoberta Menchú premio Nobel de la Paz (1992) quien forma parte de la planta de profesores.
Llamó la atención en su participación su sensibilidad docente, dijo “que ella aprendió de su madre, que siempre hay que estar bien, no se puede ayudar a nadie si no se está bien”, por ello es indispensable primero estar bien, dijo que en éstos tiempo la vergüenza es la “Ética” popular y comento la importancia de la confianza de los jóvenes en sus profesores, mientras los jóvenes confíen en sus profesores, seguiremos dando clases. Expresó su afecto por la UNAM, por la facultad de Derecho y su admiración hacia el director el Doctor Raúl Contreras, expresión a la que se unió el total de los asistentes.
En otro momento del convivio, la comunidad de píe aplaudió la valentía e imparcialidad de los ministros de la Suprema Corte, quienes un día anterior decidieron consolidar su imparcialidad, honestidad y defensa de la Justicia en el tema de las reformas propuestas al artículo 134 Constitucional a todas luces violatorio de la Constitución.
La UNAM como la Suprema Corte, han recibido ataques incluso donde al mismo rector, el Doctor Graue ha sido objeto de ellos, sin éxito, comprensiblemente se entiende que el blanco final no es el Rector sino la UNAM.
Entre los asistentes, las pláticas en las mesas versaron sobre los temas de la agenda nacional, la postura de la Suprema Corte, el compromiso con la UNAM y con México del profesorado, del Claustro de Doctores en Derecho, el más numeroso de México.
Algunos recordamos el riesgo en que ha estado Ciudad Universitaria de los intentos por cerrarla, pero en ello el Director se mantuvo firma y no obstante en algún momento intentaron cerrar Derecho con lo que se había cerrado todo ciudad universitaria, pero gracias al uso del Derecho y el liderazgo del director y la unidad de académicos, trabajadores y estudiantes la Facultad mantuvo sus actividades académicas, un logro difícil que sonaba a imposible pero se logró y evitó así que Ciudad Universitaria se cerrara.
Algunos profesores recordaron al Rector Carpizo, quien fuera rector en un momento también difícil, pero que, gracias a su formación jurídica, hasta se pudieron recuperar terrenos universitarios que llevaban años invadidos, que importante fue en esos momentos que llegara a la rectoría un jurísta.
Eduardo Sadot Morales
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