Tiempos idos, el CCH…
A mí amado Moy que fue cecehachero; a la banda cecehachera de Naucalpan
Me gana la nostalgia.
Información útil para la toma de decisiones
A mí amado Moy que fue cecehachero; a la banda cecehachera de Naucalpan
Me gana la nostalgia.
Buenos días, su señoría, matatero tero lá—saludó el Duce en la mañanera de media semana. Andaba de buen humor.
¿Te acuerdas Andrés Manuel? ¡Al diablo con las instituciones! Hoy, el canto de tu equipazo que arenga a la fanaticada, se suma en ese coro de insultante
Y que se enoja Su Alteza Serenísima Andrés Manuel I; hasta la barbilla le temblaba y aguzaba la mirada con ganas de despedazar al árbitro electoral.
El Duce blofea, justifica y… ¡Llévelo, llévelo”, damita, señor padre de familia, regale a su hijita quinceañera un viaje en el avión que ni Obama tuvo ni Biden tiene, ¿lo tendrá Putin?
¿A poco no? La bachiller y desmentidora oficial con sueños de legisladora, Ana Elizabeth García Vilchis, debió haber incluido a Su Alteza Serenísima Andrés
De pena ajena. La pareja imperial tiene ácido sentido del humor y hay quienes les aplauden y acompañan --¿borregos?-- en su caso la risita burlona de Su Alteza Serenísima porque es de obligada sintonía. Pero…