Independientemente del credo, hoy los mexicanos estamos hermanados entorno visita del Papa Francisco I, que pasará a la historia entre otras cosas, por ser el primer Obispo de Roma que será recibido este día, en Palacio Nacional, por el Presidente Enrique Peña
Nieto.
Feliz Latinoamérica entera, desde marzo de 2013, cuando asumió el pontificado por primera vez un latino, sucediendo a Benedicto XVI.
Con su llegada al aeropuerto de la Ciudad de México, y siguiendo la tradición, se trasladara a la Nunciatura Apostólica, o Embajada del Vaticano en México, en donde dormirá cinco noches, pues aunque su agenda incluye visitar otras ciudades como Ecatepec, en el Estado de México; Morelia, en Michoacán; San Cristóbal de las Casas y Tuxtla Gutiérrez, en Chiapas, regresará a descansar cada noche a la Nunciatura, hasta su traslado a Ciudad Juárez en Chihuahua, el próximo 17 de febrero.
En lo que respecta al Estado de Mexico, será recibido por el gobernador Eruviel Ávila Villegas en el helipuerto Ballisco de Ecatepec, en donde le entregará a nombre de los mexiquenses artesanías típicas de la entidad, entre ellas, un Árbol de la Vida y un tapete de Temoaya.
La organización en territorio mexiquense ha sido supervisada personalmente por el mandatario estatal y el Secretario General de Gobierno José Manzur Quiroga quien conjuntamente con autoridades eclesiásticas y el Estado Mayor Presidencial, no han dejado un cabo suelto para garantizar la seguridad de los más de 2 millones de asistentes que se esperan tanto en la misa como en la valla que acompañará a su santidad en el recorrido.
Según informes oficiales se tienen contemplados cerca de 14 mil elementos de seguridad, 24 mil voluntarios para la valla de 10 kilómetros que recorrerá el Papamóvil en Ecatepec y 3 mil más en el lugar de 45 hectáreas, predio conocido como El Caracol, en donde Francisco Bergolio oficiará la misa para los mexiquenses y visitantes que vendrán de todas partes de nuestro país e incluso se espera el arribo de visitantes extranjeros.
Pero, ¿qué espera el pueblo de México de esta visita?, el Papa ha declarado que no es un rey mago con regalos y soluciones para cada uno de los problemas que aquejan a los mexicanos. Y sin embargo, si ponemos atención a los mensajes y las múltiples declaraciones previas a su llegada, el Papa Francisco, ha reiterado no ser indiferente ante la violencia, corrupción y tráfico de drogas, dificultades que sufren los pueblos del mundo entero, no sólo el nuestro, y nos propone el camino del diálogo para alcanzar la paz.
Y Jorge M. Bergolio, inicia así su estadía en México, con un diálogo privado con el Ejecutivo nacional, Enrique Peña Nieto, imprimiéndole un carácter institucional que distinguirá esta visita de cualquier otra.
En lo personal, considero que a su partida de nuestro país, el Papa dejará renovada la fe del pueblo mexicano.