Una vez que ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR, resultó electo como presidente de México, hizo el anuncio de
destinar cerca de 500 mil millones de pesos para programas que serían fundamentales durante su administración, entre los cuales destacó la construcción de la línea férrea para un tren moderno que conectara a los Estados de Quintana Roo, Tabasco, Campeche, Yucatán y Chiapas. El proyecto, requeriría de una inversión de 150 mil millones de pesos, y estaría terminado en aproximadamente 4 años.
En este sentido, en el mes de noviembre se llevó a cabo la Consulta Nacional para la realización de (entre otros), dicho proyecto, el cual, como era de esperarse, tendría un resultado positivo.Sin embargo, las críticas antes, durante y después de la consulta, no se hicieron esperar ya que tanto ambientalistas, como políticos y sociedad civil, se manifestaron en contra de dicho proyecto, argumentando principalmente daños ambientales, considerando que fue uno de los principales argumentos para echar abajo el proyecto del nuevo aeropuerto internacional, que se construía en Texcoco, en el Estado de México y que tenía aproximadamente el 30% de avance.
El fin de semana, se hizo público que el Presidente Lopez Obrador ofrecio otorgar “estímulos” a las empresas que participen en dicha obra, señalando que “con una subvención del gobierno, por cada kilómetro que construyan, un porcentaje de apoyo vendrá por parte del gobierno a las empresas, una subvención”.
Sin duda el sureste mexicano necesita inversión para detonar ingresos y que mejor sea la industria limpia, es decir el Turismo, de aquí que es esta dependencia a través del Director general de FONATUR, Rogelio Jimenez Pons quien tendrá que realizar un quirúrgica operación política y social de la mano de los Gobernadores de Chiapas, Tabasco, Campeche, Quintana Roo y Yucatán, para que a más tardar en dos meses se publiquen las licitaciones correspondientes para los primeros cuatro tramos y se pueda ver concretado este proyecto, que no será sencillo su arranque pero al final genera beneficios a la gente.