Oriundo de Huajuapan de León, Oaxaca; Licenciado en Administración
Industrial, por el Instituto Politécnico Nacional y caracterizado por su trabajo y responsabilidad en los cargos que ha desempeñado dentro de la Administración Pública, Aristóteles Núñez, hizo el anuncio de su retiro de las redes sociales, calificándolas como “tóxicas”.
Durante su gestión al frente del SAT, Núñez Sánchez logró incrementar la recaudación a través de impuestos y el implemento de la facturación electrónica; así como combatir la corrupción al interior de la Dependencia.
Profesionalmente lo definen como un hombre justo y sencillo que hoy atrapa reflectores por el análisis del contexto político y social que lo lleva a retirarse de las redes sociales.
En efecto, el sistema político mexicano se ha formado a través de la democracia, pero también durante su evolución se ha visto un sin número de casos de corrupción.
Muchos, nos sentidos agraviados cuando en septiembre de 2014, el entonces presidente Enrique Peña Nieto sostuvo que, para combatir la corrupción, habría que partir de reconocer que es un asunto de orden cultural.
Aristóteles Núñez se separó del cargo cuando su Jefe Luis Videgaray Caso, renuncio en el año 2017 como Secretario de Hacienda, por el tema de la vista a Los Pinos de Donald Trump, desde entonces no volvió al servicio público, y se convirtió en un férreo analista político y financiero nacional e internacional. Para ello se le vio en Televisión, radio, y las redes sociales, particularmente en Twitter, espacio desde el que anuncio su despido de este medio de comunicación y hace una seria reflexión, en la cual manifiesta su sentir, en algunos puntos coincido y en otros no. Por ejemplo: dice “es más fácil quejarnos, criticar los errores y hacernos víctimas de los desaciertos de los gobiernos; es más fácil exigir un cambio cuando deberíamos empezar por cambiar desde casa; reprochamos al gobierno de las inundaciones en las grandes ciudades, pero como ciudadanos tiramos basura por doquier; queremos que papá gobierno nos brinde apoyos, pero no pagamos nuestros impuestos; queremos justicia y seguridad cuando preferimos “dar mochada” al policía de tránsito para que no nos infraccione por saltarnos un semáforo en alto.”
Coincido, en que las redes sociales pueden llegar a ser sumamente tóxicas, pero es preferible este derecho a la libertad de expresión, sin invadir la privacidad de las personas.
Estoy de acuerdo, cuando refiere que “Somos incongruentes, queremos juzgar a un gobierno cuando desconocemos la realidad, creemos estar siempre del lado de los buenos en contra de los gobiernos malos.”
Ojalá que el silencio de este mexicano, sea temporal y que, en un acto de congruencia con su propia narrativa, deje a un lado la apatía, para continuar siendo un crítico propositivo de nuestro sistema de gobierno, mas allá de los partidos políticos y así enaltecer a México.