El Servicio de Administración Tributaria (SAT) es un órgano dependiente de la secretaria de Hacienda y Crédito Público de México, que tiene la tarea de
dar aplicación a la legislación fiscal y aduanera de las personas físicas y morales del país.
Su función específica es fiscalizar a los contribuyentes para que cumplan con las disposiciones tributarias y aduaneras. El SAT es una institución que busca duplicar la eficiencia recaudatoria, ofreciendo al contribuyente las herramientas necesarias para que cumplan los recursos fijados por la Ley de forma voluntaria.
Si bien la tarea del Servicio de Administración Tributaria de recaudar los impuestos se fortalece año tras año, el SAT refiere en su Informe Tributario y de Gestión 2021, recién publicado, la mayor cifra registrada en un año, tras recuperar 123. 5 pesos por cada peso invertido en 2021, un ligero aumento frente a lo registrado en el 2020, cuando se recuperaron 123.4 pesos por cada peso invertido.
En lo que va del sexenio, el gobierno federal ha apretado fuerte en el tema fiscal. En cierta medida la fiscalización puede justificarse si se considera que no todos pagamos impuestos y que muchos contribuyen con menos de lo que les corresponde.
En este sentido el fisco ha implementado un programa de fiscalización más flexible y menos costoso, con ayuda de la tecnología, que le ha permitido incrementar la eficiencia recaudatoria a través de los programas de “Vigilancia Profunda “y “Caídas Recaudatorias”.
Este punto cobra relevancia ya que como lo he señalado en columnas anteriores la percepción es importante para generar un análisis, en este caso el 81% de los contribuyentes consideraron que el SAT es eficiente para combatir la evasión fiscal, lo que representa una mejora en cuatro puntos porcentuales respecto al año anterior.
Por ello, no obstante que la economía ha crecido poco en los últimos años, el SAT ha logrado obtener una mejor recaudación a la esperada. En este momento puede ser que no se vea un gran crecimiento del 2020 al 2021, debido a los estragos de la crisis sanitaria, pero marginalmente creció y no se vio afectado a la baja. Mantiene la pendiente de aumento.
Por otro lado, y en apego al compromiso de austeridad del gobierno federal para eficientar el gasto público, bajo el costo de la recaudación, lo que significa que no gasto más que año anterior conjugado con no devolver el dinero a los contribuyentes y con las modificaciones en la materia de deducciones.
Cabe señalar que los impuestos que pagamos los mexicanos, son uno de los principales medios por los que el gobierno obtiene ingresos, los cuáles en teoría usados para invertir en programas de salud, educación, seguridad, servicios públicos para millones de personas, etcétera.
Con esto la autoridad busca mayor recaudación sobre la seguridad jurídica de los contribuyentes, dando mayores facultades a las autoridades fiscales para legislar a través de cláusulas habilitantes para que ellas definan los supuestos, procedimientos y requisitos para la aplicación de las disposiciones fiscales, de acuerdo a la Miscelánea Fiscal y al paquete económico 2022, los cuales versan en no subir impuestas, combatir evasión y simplificar los trámites.
Con todo y la fiscalización tan molesta, México es de los países que menos recauda.