El miércoles 26 de febrero, el mexiquense FRANCISCO GARATE CHAPA en su carácter de Presidente de la Comisión Nacional Organizadora de Elecciones del PAN, anunciaba las reglas básicas de la contienda blanquiazul, fijando la fecha de la elección del nuevo dirigente nacional para el día 18 de Mayo. Para ese momento, ya eran conocidos los actores que habrían de someterse por primera vez en la historia de ese partido al escrutinio de su militancia, en aras de legitimar su proceso y alejar aunque no del todo el mote de partido elitista, quien en el pasado solo elegía a la dirigencia mediante un Consejo Político integrado por los “militantes distinguidos” del mismo
A poco más de mes y medio para la llegada de la fecha señalada, los candidatos y/o las respectivas formulas, ERNESTO CORDERO(Presidente) y JUAN MANUEL OLVIA(Secretario General); la otra GUSTAVO MADERO( Presidente) y RICARDO ANAYA( Secretario General) han comenzado a perfilarse en la contienda, cada uno fiel a su estrategia y estilo. En este sentido el equipo de “CORDERO – OLIVA” se ha evidenciado a través de una presencia mediática y recurriendo a la “guerra sucia” (aunque ellos digan lo contrario, en otras publicaciones ya hemos hecho énfasis en la debilidad de ERNESTO CORDERO por recurrir a este tipo instrumentos, en un intento de desviar la atención ante su innegable ausencia de carisma y presencia); en contra parte, sus adversarios “MADERO – ANAYA”, han avanzado a través de una campaña más sobria, y hasta cierto punto reservada, la experiencia evidente y arraigada en su equipo, pero no por ello, dejan de lado el “colmillo” necesario en este tipo de contiendas, véase por ejemplo, la aparición un tanto sorpresiva de parte de MADERO MUÑOZ el domingo en la 22 Asamblea Nacional del PAN.
Aunado a ello, las cifras no engañan, por el contrario, prueban y a este momento GUSTAVO MADERO y el ex presidente de la Cámara de Diputados RICARDO ANAYA aventajan a sus competidores; según una encuesta de Mendoza Blanco y Asociados, 47% de los militantes encuestados, tienen la intención de sufragar a favor de ellos, mientras que el 44% se dice a favor del ex Secretario de Hacienda, CORDERO ARROYO.
Con relación al gravísimo error que cometió ERNESTO CORDERO en un evento en Mérida, donde externo su intención por dirigir al PRI; MADERO dijo:”… no soy Sigmund Freud para psicoanalizar a Cordero”, y quien quita y le afloro en su subconsciente el priista que lleva dentro, como en un sueño.
Bien vale la pena recordar algunas de sus etapas, intenciones y expectativas que ERNESTO CORDERO que se ha hecho a lo largo de su carrera, quien antes de la administración del FELIPE CALDERON era un perfecto desconocido. Primero lo vimos desde el 2011 querer ser Presidente de la República no lo logro; luego CALDERON lo impuso como coordinador en el Senado, lo destituyeron y ahora en otra fantasía quiere ser líder del PAN. Por ahora y mientras el tiempo se lo permite, debería replantear su campaña para no repetir los resultados que tuvo con sus antiguas pretensiones, porque todo parece que será el CAMPEÓN DE LAS DERROTAS.