Las #MalasPalabras de esta semana tienen que ver con la DISONANCIA COGNITIVA, que es cuando una persona tiene dos pensamientos distintos que son contradictorios entre sus valores y creencias, lo que provoca un comportamiento VIOLENTO.
Durante su comparecencia del pasado 12 de octubre Hugo López-Gatell identificó “ … a un grupo de senadoras y senadores que no sólo son pequeño en número, sino que representan una minoría social a la que nos hemos referido que parecerían estar encapsulados en ideas fijas que se armaron al principio de la pandemia y no salen de ellas(…) la disonancia cognitiva es un fenómeno propio de la mente y a que todos nos puede ocurrir en algún momento cuando una realidad se contrapone a expectativas previas”, diagnosticó.
Para el Subsecretario de Salud, este grupo minoritario de legisladores se está AUTO ENGAÑANDO, al haberse quedado estancados con la ideas que se formaron al inicio de la pandemia por Covid-19 y no mostrar interés por modificar su comportamiento, consultando información adicional que les permita ampliar su criterio y lograr armonizar sus ideas, creencias y emociones.
Con mucha frecuencia la disonancia cognitiva se registra en personas adictas o fanáticas, considerado un fenómeno común que surge cuando un sujeto incurre en incoherencias con las que pretende mantener su conciencia moral y su sistema de valores y creencias. El intentar justificar actos que son contrarios a la realidad que está comenzando a entender y que ya no corresponden a las creencias que tenía, es lo que en psicología se conoce como Disonancia Cognitiva.
Ejemplos tenemos muchos: Un ADICTO al cigarro que sabiendo que el fumar daña su salud y, aun así continúa fumando, justificando “de algo habré de morir”, éste es un claro ejemplo de una persona con disonancia cognitiva.
O esos FANÁTICOS que durante meses anuncian que en determinada fecha habrá de registrarse el fin del mundo y, al llegar al día indicado el hecho apocalíptico no se registra, atribuirán a sus rezos que la fecha fatídica no se haya cumplido, antes de reconocer que se han equivocado en lo que habían pronosticado.
Ese pequeño grupo de legisladores a los que se refirió López-Gatell, permanecen en un conflicto mental que les impide madurar emocionalmente y se mantienen en un estado de CONTRADICCIÓN que les impide avanzar al razonamiento con argumentos lógicos.
Cuando uno no supera la disonancia cognitiva se hace preso de una de las peores TRAMPAS que tiene la mente, ya que el sujeto logra convencerse de una realidad que NO EXISTE, aunque esto suceda de manera inconsciente.
Una persona que no logra entender el conflicto de pensamientos por los que está atravesando, permanecerá en la búsqueda de argumentos que la mantengan convencida de que la postura que ha asumido es la correcta, aunque la mayoría opine lo contrario.
Afortunadamente los seres humanos no podemos mantenernos por mucho tiempo en contradicción, ya que nuestro sistema conductual siempre buscará llevarnos al equilibrio entre nuestras acciones y comportamiento; bueno, eso esperamos.
En algún momento de nuestras vidas todos nos hemos auto-engañado, es un fenómeno psicológico frecuente y hasta cierto punto, normal. La reflexión es la única acción que nos puede liberar de auto-mentirnos. Ver a nuestro interior, auto-evaluarnos, definir nuestros valores y nuestros ideales es un primer paso para ser coherentes y alcanzar el país que queremos.
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Marta Obeso es licenciada em periodismo titulada por la Escuela de Periodismo “Carlos Septién García”, con 30 años de trayectoria, se ha desempeñado como periodista de investigación en los diarios El Imparcia, El Universal, El Independiente y El Expreso. Es fundadora y directora general de Esfera la Revista y www.esferanoticias.com. Entre sus más destacados trabajos destacan la serie de entrevistas hechas al filosófo francés Edgar Morin y la Crónica del Eterno Enamorado; así como haber sido la primer periodista mexicana en haber entrevistado en exclusiva al cantante Luis Miguel.