A Donald Trump se le está agotando el diccionario de sinónimos para continuar
insultando a todo aquel que le signifique un recordatorio de que el burro de la clase es él y solo él…
Su economía, la más poderosa del mundo, ha iniciado un peligroso descenso , y aunque no están en recesión , los síntomas de que la maquinota yanqui de los dólares comienza a mostrar signos de enfermedad, el gran público elector de ese país ha comenzado a levantar los hombros y cejas, en clara señal de que el tal Trump no es uno de sus favoritos…
La guerra comercial con china y todos sus ataques arancelarios le están saliendo muy caro…
Trump ha presionado a los de la reserva federal, exigiéndoles que se pongan a trabajar y que resuelvan algo que el mismo creo, un Frankenstein económico sujeto a una larga cadena de ocurrencias y desatinos, las consecuencias de sus torpezas comienzan a ser focos rojos en su partido y en sus planes por reelegirse, o sea, la varita mágica de su proyecto económico ya no dio el chispazo y no se ve por donde pueda generar que los bolsillos de sus compatriotas se vean beneficiados…excepto se invente una guerra…así es.
En Washington tienen muy ensayada la receta de las armas y medio oriente siempre les ha funcionado para, primero, distraer a sus espectadores gringos, y segundo, como pivote de su economía…el petróleo entra en escena y el ataque a las instalaciones en Arabia Saudita significa el pretexto ideal para armar el nuevo discurso de la guerra trumpiana, y si algo gusta a los del norte es ese tipo de pirotecnia…les digo, son ya los más predecibles del mundo y el presidente de los Estados Unidos no podría sentirse más cómodo que aventando lumbre por la boca en contra de los iraníes …
Trump esta hasta el cuello en su casa blanca, las cosas no le han salido como el planeaba, y no podía ser de otra manera, pues nadie debe esperar que dé peras el olmo, él es un populista, es todo menos un político con líneas de estadista, su capacidad mental es más lenta que su lengua y las consecuencias las comienza a ver en el horizonte, aunque claro, los hijos del tio Sam son muy escrupulosos en eso de mantener a flote a su institución presidencial, sea Trump o una vaca, da igual pues los hilos que sujetan a sus instituciones van más allá del inquilino de la casa blanca, por ello, ante las noticias de que las torpezas de Trump en el campo económico podrían significar quedarse de rodillas ante china, ha echado a andar la maquinaria de guerra…y ahí si nadie chista.
Y solo una lección queda para todos: cuidado con ese tipo de sujetos en el poder, tal como Trump, pues tarde que temprano, las naciones terminan pagando la tozudez de sus gobiernos.