Picotazo político 01 octubre 2019

El ultimo corte fue en el 2017 y nos dice que el número total de adultos mayores en México es de 12 millones 973 mil 411 personas de 60 años y más.
53.9 son hombres y 46.1 mujeres…aquí viene lo bueno, la gran mayoría subsiste, algunos con remesas, otros con apoyos de gobierno, pero la línea de ingresos es mucho muy inferior a la que debería ser para cubrir las necesidades básicas, lo que ha llevado a que cerca del 62% trabajen en la primera empresa que les pague, pero sin contrato laboral y casi la mitad, 47% lo hace sin ningún tipo de prestaciones arrojando a que el 77% labore en la informalidad…ya teniendo estos datos , me permito expresar lo siguiente: a nuestros ancianos los estamos tratando como despojos humanos, y el cuadro de esto lo vemos todos los días en las calles, en centros comerciales , en el metro, sitios que son ocupados por este ejercito blanco y  sentirse vivos por medio del trabajo aunque este sea lo más cercano a la esclavitud.
Aquí hemos denunciado lo que sucede con las compañías que operan los servicios de limpieza del metro, Ecotec, una de ellas, propiedad de un tal Ulloa, a quien la familiaridad con la oficina de la jefa de gobierno le ha permitido abusar del modelo de outsourcing y contratar a cientos de ancianos para que limpien escaleras y arranquen chicles de los pisos, abuelitos que no tienen servicios médicos y que son insultados por medio de un salario que no llega a los tres mil pesos mensuales, vaya manera de reconocerles los años y años de vida productiva y entrega a estos seres humanos, mientras estos “empresarios” como Ulloa se hacen inmensamente ricos, vaya discurso hipócrita de las autoridades que dicen velar por nuestros abuelos, vaya sociedad que no se inmuta ante estos abusos!!!
No hace muchas décadas, a nuestros abuelos se les honraba, se les cuidaba, tener a uno de ellos vivos en casa significaba poseer un faro de experiencia y sabiduría, se les protegía e hijos y nietos giraban en torno a sus míticas presencias…
Hoy eso ha cambiado, propio de la degradación de esta sociedad hemos ido expulsando a los que ya pintan canas, los que se van encorvando, a los lentos abuelos, en muchos sitios se les ve como estorbo, como meras decoraciones, se les agrede y desprecia por no ser útiles, por ello es que no es extraño el que se permita este tipo de maltrato como el que se aprecia en el metro…
Una parte de esta sociedad se ha podrido y que nos pinta de cuerpo entero, pero aun peor, que muestra cómo puede llegar a ser un tema sin mayor importancia para un gobierno, pues permite que siga ocurriendo, ahí están los llamados y auditorías a las empresas de limpieza del metro, ahí está el silencio de la directora de ese sistema que se niega a mirar de frente a esos abuelos y explicarles el por qué ella permite su explotación.
No nos engañemos, a las autoridades solo les interesa llamar la atención de ellos cuando vienen tiempos electorales, quieren su sufragio, solo eso, mientras, para la autoridad, los ancianitos se pueden seguir muriendo en vida…o ¿cómo se debe tomar la indolencia de estos funcionarios que protegen negocios de amigos del poder? ¿a costa de la salud mental y física, de la dignidad de estos cansados seres humanos? Es un crimen y punto.