El país es un chiste, uno lúgubre, humor negro constante, absurdamente pronosticable. Ayer un trailer cargado de indocumentados se estrella, más de
medio centenar de seres humanos pierden la vida, otros tantos en hospitales luchando por no morir. Guatemaltecos y salvadoreños escapando de sus pesadillas para tocar tierra en el paraíso de lo grotesco.
Es México una tumba muy generosa, sobre todo con los más jodidos. El camión cumple religiosamente con lo que aquí hemos dicho hasta el cansancio, quedarse sin frenos sirve para cubrir la cuota de cadáveres (¿recuerdan el tractocamión estrellándose en la caseta de Puebla ?). Verdad que no exageramos cuando anticipamos que así es debido a que ninguna autoridad se “faja los pantalones” y termina con el cáncer de traileros convertidos en armas de destrucción masiva?
Estas almas que ya descansan, las indocumentadas, tuvieron que pasar por seis o siete retenes, es claro que el aceite lubricante que hace posible que todo se deslice es el de la corrupción.
Pero haré una observación necesaria, hemos culpado al Instituto Nacional de Migración, a la Guardia Nacional, a los militares de estar en constante fallo en el terreno del tráfico de humanos, cierto, nadie duda del diagnóstico y de la franja de responsabilidades, solo que aquí es justo preguntarnos, ¿Y las autoridades del estado de Chiapas? Donde están sus policías, sus fiscales y su gobernador? ¿A qué se dedica una administración que encabeza la principal tarea de revisar que estás cosas no sucedan?
En estos tiempos es muy práctico mentarle la madre a la Federación, pero seamos precisos en esto, de Chiapas sólo hemos sabido de levantamientos de autodefensas, de cruce de indocumentados, de dramas humanitarios por el desplazamiento de comunidades enteras producto de la violencia de los cárteles, de asesinato de periodistas que se atreven a denunciar los vínculos de sus autoridades con el crimen organizado. El cuadro obliga a cuestionarnos, ¿Y el gobernador? ¿Y su fiscal? ¿Y el séquito de sin vergüenzas que le acompañan en asuntos de negocios y bestial saqueo del estado? ¿A nadie le llama la atención de que el cruce de centroamericanos sea tan común en esa entidad sin que el gobierno estatal se despeine? Es evidente que la danza de millones de pesos surte los cajones en las oficinas de muchos servidores públicos en Chiapas al grado de mantener fluido el tránsito de esos seres humanos. Es claro que allá, al gobernador Rutilio Escandón le interese lo que suceda con los migrantes, una muestra es que por sus fronteras sigan cruzando cientos, sin que uno solo de sus músculos policiales hagan lo que están obligados a realizar : evitar que un maldito trailer cruce cargado de potenciales víctimas.
Dejemos a un lado las esquelas y paremos en este punto: ¿Quién llamará a cuentas a uno de los peores gobernadores de la historia de Chiapas?No es regaño, es Picotazo Político
@UrbeDeHierro @Anpert2
Miguel Ángel López Farías
Historiador. Director y conductor del programa radiofónico 'Urbe de Hierro', transmitido por ABC Radio 760 AM de 4 a 5pm.
Presidente de la Academia Nacional de Periodistas de Radio y Televisión (ANPERT).
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