Me parece interesante el hecho de que los malosos ven la oportunidad en Oaxaca, para destruir la credibilidad en las acciones de gobierno de Alejandro Murat, por ello, si va a un lugar de la tragedia por terremotos, malo, y si no va, pues peor, curiosamente creo que sería idiota que un Secretario de Gobernación, el gobernador Alejandro Murat y sus funcionarios creyeran pertinente viajar de noche y provocar un accidente en donde lo más
seguro es que no saldrían vivos en caso de explotar el helicóptero en donde viajaban, y que en el mismo se generara, por el accidente, la muerte y las heridas de varias gentes que también, en forma normal se protegían de los temblores en un campo abierto que se utiliza normalmente para las operaciones de aviación, y nadie pensaría que esas familias habían planeado estar ahí para que les cayera el helicóptero encima… así que, no hay duda que la operación “mano negra” se cuela con muchos recursos desde las oficinas de los hampones encabezados por Gabino Cué, por Jorge, el coco, Castillo, y por todos aquellos que están involucrados en los saqueos de los fondos públicos de Oaxaca, y sobre todo, de los fondos públicos del sector salud, cuando se trataba de llegar al fondo de la red de saqueadores encabezados por los coyotes que, ahora, están protegidos por el mismo presidente, cuando a los dueños del CCE se le brindan las facilidades para continuar con el saqueo de tierras y robo de bienes públicos, con tal de calmar los ánimos de la ultraderecha, a pesar del daño que continúan haciendo en la entidad… pero así hay que confundir a las gentes para continuar chingadose el dinero de los bienes y fondos públicos para que, un grupito de hampones del pasado, sigan haciendo sus negocios privados, mientras tanto, el actual gobierno, en la parálisis, porque no sabe qué hacer para dar respuesta a la acción brutal de desprestigio desatada con muchos recursos que, al final de cuentas, no son de los mañosos, sino de lo que saquearon y robaron a Oaxaca, y así, cualquiera hace política del terror…
Tampoco creo que sea una acción política para joder al Secretario de Gobernación, los que operan esa campaña, son rateros y corruptos, no pendejos, y es así que el mismo secretario de gobernación Alfonso Navarrete Prida hace la aclaración que en el accidente en Oaxaca, está al margen del protagonismo, sino que ha sido parte de un acto de responsabilidad profesional del momento, de acuerdo a los protocolos de emergencia aprobados para este tipo de tragedias en el terremoto, cuyo centro se localizó en Jamiltepec, Oaxaca.
Cuando se habla de legalización de las drogas, hacen un escándalo como gallinas viendo en el corral a los gavilanes, y no dejan de cacaraquear, y se olvidan de los daños terribles que tenemos que pagar todos los mexicanos por el cáncer de pulmón, y en general, por los cigarrillos, y con el cuento de que se propicia la siembra de tabaco en el país y se generan empleos se envenena y se envicia a millones de mexicanos, y cuando se tienen que atender por los estragos del consumo, lo tenemos que pagar en el sector salud, todos los mexicanos, mientras los empresarios cigarreros hacen sus negocios y se embolsan millones de pesos con un producto que mata a miles de mexicanos cada año y nos obliga a atender, sin que las empresas tengan ninguna obligación de participar en los gastos, ni incurren en delitos, porque están protegidos por las leyes, y esto nos muestra que las grandes tragedias son producto de la complicidad y corrupción entre empresarios y políticos. Lo mismo sucede con los consumos de alcohol, en México, el consumo, producción y venta están autorizados, y nadie controla su consumo, de tal suerte que a las autoridades solamente les importa que paguen los impuestos para que sigan gozando de recursos para chingarnos a todos.
De acuerdo a los datos de la Organización Mundial de la Salud, se provocan más de 2.5 millones de muertes a nivel global por el consumo de bebidas embriagantes, y así, de ese total, 320 mil muertes son de jóvenes entre 15 y 29 años, en el caso de México cada año tenemos muertes por el consumo de alcohol de más de 30 mil, en enfermedades que son terribles como la cirrosis, los accidentes de tránsito, por la violencia que generan asesinatos y suicidios y nadie protesta ni dice nada, además de que miles de gentes son atropelladas por los borrachines sin que existen protección a las víctimas. En México, cada uno de diez mexicanos, consumen bebidas embriagantes en un promedio de cinco o más copas, sobre todo en los fines de semana, de los cuales son 300 mil adolescentes que no tienen la edad legal para beber, pero a los que les venden sin control alguno, por esa razón, uno de cada diez asesinatos son producidos por el consumo de bebidas embriagantes y se aumenta cada día la violencia familiar, pero los conchudos empresarios no lo ven y así se sigue haciendo un enorme negocio que incluso provoca el robo y el saqueo de las fuentes agroalimentarias y de agua a las comunidades. Miles de muertos y muchas ganancias a los empresarios del vicio sin que tengan obligaciones ni responsabilidades en este manejo, así, vemos que en México, cuando tienes un negocio que mata pero que produce muchas ganancias, también gozas de la protección de políticos y funcionarios y, por supuesto, de los “empresarios de la comunicación” que se ven beneficiados por la publicidad de esas empresas a pesar de que, al anunciarlas, se promueve el consumo, y por tanto, de una u otra manera, seríamos cómplices de los asesinatos y accidentes que matan a miles de mexicanos cada año, y cuyos responsables gozan de total impunidad… no hay duda de que andamos mal, muy mal, y por eso en vez de atender y reflexionar sobre los verdaderos problemas sociales que provocan muertes y desgracias, nos distraemos en los chismes que se lanzan para traernos en la pendeja, pero no para que reflexionemos, porque entonces, veríamos la verdadera magnitud de la tragedia que vivimos en la actualidad…