COMO DIRÍA GUSTAVO MADERO: “LE MUERDEN LA MANO AL QUE LES QUITÓ EL BOZAL”
PUES NO HAY DUDA DE QUE EL PRESIDENTE ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR, EN REALIDAD, ESTABA SÚPER ENCABRONADO con la prensa y los medios de comunicación que se atrevieron a decir sus “cosas” en las páginas o la radio o televisión mientras se veía, en todo el país, la pifia desarrollada por un coronel del extinto Estado Mayor Presidencial, que sin más, determinó que se generara la acción para la detención de Ovidio Guzmán, y bueno, esto, ha puesto en un serio conflicto al presidente y a su gabinete de seguridad, pero eso, el escándalo y la pifia, no la desarrollamos los comunicadores, es el resultado, sin duda, de alguna acción más escalofriante, donde un ex miembro, coronel del Estado Mayor presidencial, sin acatar las instrucciones, y por su cuenta y riesgo, dice él, genera este súper desmadre, y ahí está, muy tranquilito y quitado de la pena, cuando todos sabemos que los miembros del EMP, fueron desmantelados de su organismo por el presidente López Obrador, y sabemos que una de entre muchas causas de este desmantelamiento, es que ellos fueron los sicarios responsables de la tragedia provocada en Tlatelolco en 1968, recibiendo las instrucciones de GDO, y por supuesto, con las ligas de la CIA, con los funcionarios ligados a este organismo norteamericano que trabajaban para los Estados Unidos, con la clave de LITEMPO, así que ahora, pues si no es por eso, si es porque andan haciendo de las suyas a altos niveles de mando, se debería investigar bien sus relaciones y a quién en realidad obedece, porque lo real es que no obedeció al Secretario de la Defensa, ni Alfonso Durazo, ni a ningún canal que le llevara a mostrar disciplina y lealtad al mismo presidente de México, a los mejor, por ello mismo, el presidente, exigía al Secretario de la Defensa proporcionar el nombre del responsable de este enorme desmadre que nos ha traído locos a todos, incluso, a los narcos…
El presidente, en muchas ocasiones, ha aceptado que se equivoca, que no es un todo lo conozco ni todo lo puedo, por ello, debería esperar, cuando menos, a las disculpas que ofrecerían los medios que se equivocaron al mostrar la foto de un oficial que, simplemente, cumplía con sus instrucciones, y que los malandrines lo detuvieron y mostraron, y así, algunos medios, lo publicaron ,como si fuera uno de los narcos vestido de oficial del ejército, y esto, pues cala y debe calar e indignar no solamente al ejército, sino al afectado, al que no se le han brindado las disculpas oficiales y las de los medios.
Y pues la neta, sin ofender a ningún presidente, pero cala lo dicho por el presidente de que puede generalizar eso de que: “muerden la mano al que les quita el bozal”, y lo digo de buena fe y con mucho respeto, porque durante muchos años, muchos de los que hoy escribimos profesionalmente en los medios de comunicación y la radio o la televisión, hemos luchado a nuestra manera y dentro de nuestros niveles y capacidades para desplegar la libertad de prensa que, por años, estuvo limitada por muchos mecanismos, incluyendo el control directo del papel y los recursos publicitarios, como hoy, y demás mecanismos de distribución por el mismo presidente de la república ,y si hemos llegado a esto, es, por esa lucha de muchos pero muchos comunicadores y políticos, y no es gracia del presidente ni se debería comparar con Gustavo Madero, porque en muchos, puede ser ofensivo y pensar que se refiere a todos y no a los que son responsables de los hechos que le calaron, hasta el nivel de sacarlo de casillas y mostrar su coraje e indignación, y repetimos, no somos los causantes del escándalo, ahí tiene ya al que fuera responsable del mismo desmadre del que se queja y que dejó varios muertos en Culiacán y heridos, y sobre todo, pisoteado el honor y la eficiencia del estado mexicano. Contra él debería enfocar su coraje e indignación, no contra los periodistas que, en la presión del trabajo, también cometen errores y la cagan, pero no como patitos, a cada rato, sin, de vez en cuando…
Tan lo entendemos y mostramos la solidaridad, los medios y muchos comunicadores, es que todos coincidimos en que el ex presidente, Felipe Calderón, es el responsable y entreguista a los norteamericanos por el efecto de la enorme tragedia que ha padecido el país en asesinatos y desapariciones, en viudos y huérfanos, en desplazados, y en general, en el aumento de los grupos delincuenciales, armados, con armamento de alto poder proporcionado por los mismos norteamericanos y alentados por Calderón en sus acciones violatorias a la soberanía nacional, cuando les permite a los agentes norteamericanos repartir, vender y regalar armas a los grupos mafiosos y a los mismos policías, en programas, investigados y denunciados en los mismos Estados Unidos, y que nos ha dejado la matazón que vivimos con horror y terror los mexicanos, y ahí anda, como si nada, libre y jodiendo, al igual que sus cómplices y “colaboradores” que se enriquecieron con este asunto, al desviar miles de millones de pesos del presupuesto nacional, para la GUERRA CONTRA EL NARCOTRÁFICO, y poder adquir equipos y armamentos con los cuales se enriquecieron y entregaron la soberanía y la dignidad nacional. Ahí están los responsables, señor presidente, y no somos culpables los comunicadores, lo son los hombres que han gobernado mal y entregado soberanía y dignidad nacionales, y a los que se mantiene en libertad y gozando de sus negocios y fortunas.
Ahora, en este incidente que afecto a su administración, tampoco fuimos, los medios, los que generamos los escándalos y las malas informaciones, salieron de esos mecanismos y de los errores o pifias de las autoridades, y ahora, ya se conoce al responsable, y no pasa nada, ni siquiera se le investiga por no solicitar el permiso para actuar en un caso tan delicado, que los mismos gringos, sin duda, lo generaron y alentaron, ellos, proporcionaron los datos para la localización de Ovidio, así que se podría decir que ha sido una verdadera traición a la patria la que ha generado este coronel, que nadie sabe a quién responde, en mando y lealtad, porque ha mostrado que no responde ni al Secretario de la Defensa ni al Presidente de la República, y eso, es, ciertamente grave, y no trae bozal, trae armas y matan o generan un verdadero desmadre, con una gran tragedia nacional.