Rafael Caro y la pandilla empleados de la CIA

POR AÑOS ESCUCHAMOS LAS HISTORIAS DE RAFAEL CARO QUINTERO Y DEL GRUPO JALISCO, se dieron muchas versiones sobre el tema y la muerte de Enrique Camarena y su piloto, y de ahí el descubrimiento de muchas relaciones políticas y financieras e incluso militares con ese grupo, y pocos prestaban atención a la realidad porque preferían que se contaran aquellas historias donde Rafael Caro declaraba abiertamente que si lo dejaban “trabajar,” él, podría pagar la deuda externa del país
y se le ligaba en romances con aquella bella mujer, pariente del entonces gobernador del estado de Jalisco, y se sacaban notas de la fortuna y de los regalotes que les daban esos mafioso a sus “novias”, poco se habló entonces de las actividades del Rancho “El Búfalo” que enclavado en el Estado de Chihuahua producía, en miles de hectáreas, miles de toneladas de marihuana que posteriormente se supo eran enviadas con todas las protecciones “oficiales” y seguridad a los Estados Unidos, y en donde además, cuando se cerraron las operaciones del mismo, se encontró que existían miles de trabajadores y que la salida daba directamente a las instalaciones de la entonces Policía de Caminos y eran cientos de camiones los que transportaban esa droga, marihuana, que algunos señalaban era destinada al consumo de los soldados norteamericanos en varias partes del mundo y que toda la operación era coordinada POR LA CIA y por medio del coronel Oliver North y que las utilidades se repartían entre los mafiosos encargados de esa operación con Don Neto, Caro, Miguel Félix Gallardo y otros más y que otra parte era destinada a pagar los servidos y silencio de políticos, policías e incluso militares,  coordinados todos por la DFS, y se descubría en los Estados Unidos que las utilidades o parte de las mismas que se utilizaban sin el control gubernamental de parte de la CIA, estaban destinadas, por ejemplo, al escándalo IRÁN-CONTRAS y todo esto generó una enorme movilización con graves daños a México y sus instituciones, al descubrirse, entonces, que en realidad el narcotráfico tenía un “control” oficial y que los grupos del narcotráfico tenían repartidas las rutas y se coordinaban por medio de la DFS, PJF, grupos especiales de militares y por supuesto operaban con los acuerdos especiales entre funcionarios mexicanos y los acuerdos de la CIA, dejando a un lado a la DEA, razón por la cual se sostiene y se dice que se asesinó a Enrique Camarena y se confrontaron las cosas, y cuando se pelean las cocineras se descubren las verdades, y esto fue lo que llevó a la cárcel a aquel grupo tan especial de narcotraficantes que gozaron de enorme protección y riquezas de tal suerte que no fueron jamás extraditados a los Estados Unidos y ahora, cuando por no se sabe en realidad  por qué razones salen de la Cárcel los principales miembros y “desaparecen,” al parecer la DEA pretende conocer la verdad y por ello busca afanosamente a Rafael Caro Quintero que sería uno de los que en realidad conocerían las entrañas de aquel episodio y de sus relaciones con la CIA, los funcionarios mexicanos y muchas cosas más que se ignoran a la fecha, y por ello, ahora, ofrecen veinte millones de dólares para quién lo entregue a las autoridades norteamericanas. Pues algo muy gordo se estará cocinando a nivel internacional para todo esto.
         Tenemos en puerta las demandas de investigación o aclaraciones que les ha solicitado el presidente López Obrador  a las agencias y gobierno norteamericano para que den cuenta del proceso de violación a la soberanía nacional con el tráfico de armas a México, con el contubernio de autoridades y políticos mexicanos en los programas RÁPIDO Y FURIOSO Y RECEPTOR ABIERTO, y esto daría a conocer cuando menos a los grupos importantes de políticos, financieros, empresarios, de policía y agencias de seguridad nacional que estuvieron o están ligadas a las agencias norteamericanas y trabajan en tales proyectos, que si se conocen es por las investigaciones en los Estados Unidos cuando tienen fallas o se lastima en las mismas a agentes norteamericanos, y es por ello que es urgente establecer las reglas de operación y de colaboración de las agencias internacionales con las agencias mexicanas, pero para ello, es necesario conocer la realidad de los acontecimientos y es por ello que no se pueda dejar a un lado lo que ahora ha despertado Rafael Caro Quintero y la intensa persecución de la DEA en su contra, y estamos convencidos de que por las relaciones que mantuvo o mantiene con la CIA, lo que se debería conocer es de gran importancia para México y para los mexicanos ya que en todo esto además de las instituciones nacionales, algunas desaparecidas, y de los políticos, financieros, empresarios, policías y militares que están en tales niveles de operación se encontraba el mismo cuñado del presidente Luis Echeverría, quién fuera detenido en Estados Unidos y a pesar de la fuerza del presidente jamás logró ni la reducción de las penas ni su extradición a México, porque seguramente como muchos han especulado, desde 1968 existía un poderoso grupo político que estuvo ligado a los agentes de la CIA y colaboraron para esa agencia con los nombres de LITEMPO y los números que les dieron, en aquellos años justificando su proceder porque la GUERRA FRÍA  marcaba mucha de las acciones políticas que México debería encabezar en América Latina. Así que mucha de esa historia contemporánea no se ha terminado de analizar y se desconocen las consecuencias, incluso en la matanza de Tlatelolco y en lo que se conoce en México como la GUERRA SUCIA.
         Hoy, con los cambios profundos que se tratan de realizar en México es vital para que no se repitan esos acontecimientos que enlutan al país y se conozca la realidad porque todavía, por desgracia, hay muchos importantes operadores que siguen operando para que la verdad se oculte y no se conozca porque al conocerla se podrían tener mejores caminos para el cambio y es lo que no quieren. Así que si detienen a Caro, seguramente todo se enfocará a lo que han realizado mal en sus operativos la CIA… y ya veremos si canta ahora para conocer la verdad, ojalá lo puedan detener antes los mexicanos para conocer algo de lo mucho que seguramente conoce y oculta.