Siento que en ocasiones calificamos el comportamiento de los de enfrente y no medimos nuestra propia conducta. Toda vez que muere un famoso nos
creemos aquella promesa de que faltan dos más "porque siempre fallecen tres" como si se tratase de una fórmula predeterminada.
Me llamó la atención de manera muy particular que luego de que informe en redes sociales que la actriz Silvia Pinal, contagiada de COVID, estaba hospitalizada, así como como acto reflejo iniciaron los mensajes apostando por la muerte de Chabelo. Estoy convencido que nunca debemos burlarnos ni festejar la avanzada edad de un ser humano o cualquier tipo de incapacidad que padezca.
Javier López ha formado parte de varias generaciones que aprendieron a divertirnos sanamente en la televisión. Es un mexicano que merece reconocimiento y un ser humano al que se le debe respeto. Es patológico pronosticar quién muere primero si Chabelo o “Chabela” (la reina británica). Mexico está perdiendo a sus grandes figuras en la academia, en la ciencia, en las artes, en las humanidades por tres razones, la violencia, la pandemia o la edad.
Las enseñanzas que han heredado forman parte de nuestra personalidad y evolución colectiva. Somos tan cínicos e incongruentes que llenamos estadios, plazas, auditorios, palenques aulas para aprenden de ellos, para ovacionarlos y apenas unas horas después son motivo de burla en las redes sin que nadie los defienda. Dice el refranero que nadie debe desear la muerte del prójimo pero “las benditas redes” nos han otorgado ese permiso. Llegar a ser anciano, viejo o de la tercera edad, es meritorio de cariño, acercamiento, apoyo. Es saberlos escuchar por las grandes experiencias que quizá nosotros no logremos. Es saber que formaron familias y que también, como todos, tienen sentimientos y emociones.
No ha de ser nada gafo despertarse todos los días para saber cómo van los pronósticos para su muerte y sólo porque han cumplido un año más de vida. En lo personal he tenido el gran privilegio y oportunidad de conversar con verdaderos sabios universitarios, seres extraordinarios que saben cómo y de qué manera colocar ideas, estructurar argumentos y proponer ideales. Entenderlos es vital, es importante. Disfruto las actuaciones en teatro de magníficos virtuosos como Sergio Corona o Ignacio Lopez Tarso. Me inyectan entusiasmo y energía las voces y letras de Cesar Costa, Angélica María, Alberto Vazquez, Enrique Guzmán. A los ya desaparecidos físicamente se les valora más sus obras como Armando Manzanero o Vicente Fernández.Todos ellos y muchos más merecen homenaje a su trayectoria. Todos los días en mi espacio informativo en la radio recibía información y anécdotas únicas de mis queridos Jorge Zúñiga, Pedro Ferriz, Fernando Mota, Luis Ignacio Santibañez, Luis Cáceres, todos ellos parte fundamental del nacimiento de la radio y tv en Mexico.
Ahí también Fernando Marcos, Jacobo Moret. Y todos los que mencionó cumpliendo hazañas cotidianas de convivencia. Todos ellos sumando años con enorme dignidad. Muchos,la mayoría de los que me acompañan en la lectura de este texto, pasaron (pasamos) horas de nuestra vida escuchando a Cri-Cri, al Tío Gamboín, al “loco” Valdés o al mismo Chabelo “amigo de todos los niños”. Y debemos aceptar que esa magia limpia, de convivencia familiar, de comunicación la hemos perdido. Víctor Iturbe, Juan Gabriel, José José, el “viví Hernández”, Manolo Muñoz, los Hermanos Carrión, J. Laboriel, son y están vigentes. Escuché lleno al estadio de CU cantando canciones de José José en su memoria, fue muy emotivo, lo mismo que el homenaje que se le brindó en el Salón de la Fama bajo el liderazgo de Toño Moreno, allá en Pachuca.Entonces por qué participar de burlas insanas, incluso por sus enfermedades o adiciones, como si todos nosotros tuviésemos tan alta la moral que nos permite descalificar a los demás. Lamento que Silvia Pinal esté delicada, me gusta saber que Chabelo está vivo. Vaya momentos que nos han regalado y todo con un enorme talento, energía y esfuerzo. Cada quien en lo suyo, con su vocación, con su entusiasmo pero la hemos pasado juntos y hasta pagamos para verlos. Simplemente por su biografía valen y mucho más que aquellos que viven de la burla, la denostación y menosprecio que por supuesto no aceptarían se aplicara a sus familias.
Carlos Ramos Padilla
* Conductor del programa VaEnSerio MexiquenseTV canal 34.2 (izzi 135).