La Iglesia católica mexicana decidió celebrar el 30 aniversario del restablecimiento de las relaciones diplomáticas de México con la Santa Sede durante la
administración de Carlos Salinas de Gortari, un evento que puso fin a un largo período de debate y confrontación que inició con la persecución religiosa sufrida por los católicos durante las primeras décadas del siglo pasado y los altibajos registrados en tres décadas. Recordamos las visitas de Juan Pablo Segundo, el beso al anillo cardenalicio de Vicente Fox, la misa privadas en Los Pinos, el beso que le dio la vuelta al mundo de Vicente y Martha presionando para anular su matrimonio, la caso de pederastia Maciel, el tiroteo que le costó la vida al Cardenal Juan Jesús Posadas Ocampo y la conflictiva comunicación con Girolamo Prigione. En la editorial del semanario católico "Desde la Fe", la iglesia católica señala que en septiembre de 1992 las autoridades mexicanas y del Vaticano impusieron su firma en un documento que ha permitido a la Iglesia caminar junto con el Estado Mexicano, incluso en el ejercicio político del voto electoral. Hace 30 años el actual Secretario de Estado del Vaticano, cardenal Pietro Parolin, fue asignado a la Delegación Apostólica en México bajo la titularidad del Nuncio Girolamo Prigione, personaje oscuro que me tuvo relaciones cercanas con los hermanos Arellano Félix, incluso permitiendo la visita de los sicarios a la Nunciatura en la Ciudad de México cuándo Jorge Carpizo era Secretario de Gobernación.
Parolin formuló un llamado a las autoridades mexicanas a impulsar “un renovado pacto de mutua colaboración, marcado por un profundo respeto de la legítima distinción entre Estado e Iglesia, un pacto basado en el principio de la laicidad”. Y esto se da cuando la administración de AMLO ha solicitado a la jerarquía católica ofrezca disculpas a nuestro país y sociedad por la conquista. Antes en el 94 las relaciones se habían deteriorado por la intervención de algunos clérigos durante el levantamiento armado de los zapatistas en Chiapas, con el exagerado protagonismo de Samuel Ruiz, Manuel Camacho Solís, Marcelo Ebrard y el sub comandante “Marcos”. El actual Papa, aún siendo latinoamericano, ha estado distante de México por los temas de la homosexualidad y aborto. Las nulas coincidencias con Morena han dejado crecer la sospecha de una ruptura, pero la pandemia vino casualmente a reducir la confrontación y dar un respiro a los temas. No ha sido fácil la historia de la Iglesia en nuestro país, quedando las cicatrices de la Santa Inquisición, la guerra cristera y los escándalos por el abuso sexual a menores. No hay duda que se han perdido millones de fieles y las razones son múltiples, pero cierto es que las homilías han extraviado su función y destino y en mucho se han convertido en arengas políticas o reproches y sanciones hacia la sociedad. Ministros de culto que incluso han llamado a la insurrección y a movimientos armados o bien a cambio de narco limosnas son capaces hasta de bendecir armas asesinas.
CARLOS RAMOS PADILLA*
@cramospadilla
*Conductor del programa Va En Serio mexiquense tv canal 34,2 izzi 135